... al contrario de lo que dicta el sentido común, los individuos tienden a aferrarse a sus opiniones, aun sabiendo que no son ciertas, especialmente en el ámbito de la política. Este año, una investigación del MIT publicada en la revista
Science presentó conclusiones inquietantes: en Twitter las noticias y rumores de contenido engañoso tienen un 70% más de posibilidades de ser retuiteadas que las imparciales. En las redes sociales la mentira juega con ventaja frente a las afirmaciones verdaderas porque a menudo reafirma aquello en lo que creemos o deseamos creer, así como lo que más tememos, nuestros miedos más arraigados. Incluso allí donde se presenta evidencia de lo contrario, las personas por lo general preferirán aferrarse a sus ideas: la creencia es contumaz.
Eva Borreguero,
Frente a la desinformación, El País 25/12/2019
[https:]]