Kant pasa por ser uno de los autores más difáciles para los alumnos. Posiblemente la mayor dificultad está en el vocabulario que emplea el autor. Sin embargo, las ideas centrales no son nada complicadas, así que aquí van cinco ejemplos, dos de ellos kantianos, para superar estas dificultades y perplejidades:
- La razón y la paloma: imagen del propio Kant, según la cual la razón viene a ser como la paloma que piensa lo rápido que volaría sin la resistencia del aire. Así la razón, tiende a soñar lo mucho que conocería sin la resistencia de los datos de los sentidos. Ignoran, paloma y razón, que el aire y los datos empíricos hacen posible el vuelo y el conocimiento.
- Ni contigo ni sin ti: algo así debe decirle la razón a las preguntas de la metafísica. Es también metáfora del propio Kant: jamás podremos contestar de forma definitiva las preguntas de la metafísica, y sin embargo no podemos evitar el volver a ellas como a una antigua amante. Ya lo dice la canción: “ni contigo ni sin ti, tienen mis males remedio…”
- El conocimiento en Kant es como aquella vieja explicación de la reproducción humana a un niño: lo escuché hace ya algunos años y tiene su gracia. Resulta que el sujeto trascendental pone una semillita (de estructuras de conocimiento innatas, se entiende…) en la experiencia empírica y de ahí surge el conocimiento seguro.
- Los filtros del agua: igual que el agua va pasando por diferentes filtros y depuradoras hasta salir por el grifo, así le ocurre al torrente de datos que nos viene dado. Tras pasar por el filtro de la sensibilidad, el entendimiento y la razón se transforma en un conocimiento seguro. Ejemplos similares he oido por ahí referidos a la disgestión: igual que la comida se transforma, el sujeto trascendental tiene que digerir las impresiones sensibles.
- Los animales en libertad y el noúmeno: pretender conocer el noúmeno es parecido a aquellos documentalistas que presumen de grabar animales en estado salvaje, en régimen de libertad absoluto. La cámara es, sin embargo, condición de posibilidad y límite del documental. Es imposible observar un animal en régimen de libertad absoluto, sin que se vea condicionado por la presencia humana. Tan imposible como conocer el noúmeno kantiano.