Mensaje de la Directora General de la UNESCO, Irina Bokova, con motivo del Día Mundial de la Filosofía
17 de noviembre de 2011
La filosofía, el ejercicio del pensamiento crítico y la libertad de expresión son elementos fundamentales en la búsqueda colectiva de respuestas duraderas a los retos de la paz y el desarrollo. En esta idea reposa el Día Mundial de la Filosofía, que la UNESCO viene celebrando desde 2002.
En 2011, la extraordinaria efervescencia de la Primavera Árabe invita a cada uno de nosotros, actores o espectadores de esos acontecimientos, a meditar sobre el sentido de la historia, la justicia social, la igualdad entre los sexos y las libertades fundamentales. Últimamente hemos padecido varias catástrofes de gran magnitud que confieren estremecedora vigencia a la reflexión sobre el lugar del hombre en la naturaleza. Todos esos episodios nos exigen que redoblemos esfuerzos para dar a todos, jóvenes y menos jóvenes, los medios de reflexionar sobre sociedades que se encuentran en plena mutación.
La filosofía es una fuente inagotable de renovación de los idearios y las sociedades. Este año, el Foro de la Juventud de la UNESCO permitió de nuevo apreciar en toda su magnitud el hambre de pensamiento reflexivo e innovación intelectual que consume a los jóvenes. Para responder a ello, la UNESCO quiere movilizar a la comunidad de las ciencias humanas en su conjunto con el fin de estimular la querencia por la filosofía desde la infancia. Las iniciativas de praxis filosófica con niños son muy prometedoras y traen consigo verdaderas posibilidades de progreso educativo, por lo que merecen que les prestemos gran atención.
El 17 de noviembre, la UNESCO y sus colaboradores en muchos Estados Miembros organizan cientos de coloquios, conferencias y debates. La Red Internacional de Mujeres Filósofas, creada en 2007 bajo los auspicios de la UNESCO, celebrará su tercer congreso en París. Se trata de uno de los principales vehículos de intercambio internacional que permite a las mujeres filósofas intervenir y ejercer su influencia en los debates contemporáneos.
La práctica de la filosofía es una dinámica que beneficia a toda la sociedad. Ayuda a tender puentes entre los pueblos y las culturas y refuerza la exigencia de una educación de calidad para todos. Además, invita a respetar la diversidad cultural, el intercambio de opiniones y el aprovechamiento colectivo de los logros científicos, todo lo cual es condición necesaria para un debate auténtico. El 17 de noviembre, movilicémonos para explotar este formidable potencial transformador que encierra la filosofía.