Siempre me he preguntado de que manera se aprende a dejar de trabajar cuando eso del trabajo no deja de ser una forma de gastar el tiempo y la vida con obligaciones sociales. Alguien dijo hace tiempo que el trabajo dignifica. En ese trabajar se nos dirige la acción hacia la productividad social de un modelo que nos determina la validez personal por aquello que producimos.
Mi reflexión