La noticia llegó . Fría . Alguien está despidiéndose de la vida . La muerte es un adiós más pero sin posibilidad de retorno. Lo he conocido hace tanto y tanto tiempo. En los paraísos perdidos de la infancia. Jugando con la nocturnidad de las sábanas y mantas. Entre la novela de
Foster "Maurice " y las lecturas de
Michel Foucault. Se apartó de la vida hace tiempo. Mucho tiempo. La noticia es un cuchillo clavado en la cabeza. Cortante. Recuerdas el paraíso , el lugar del sin tiempo, .. el sudor de los cuerpos de dos adolescentes. La experiencia grabada en la sien , ahora destruyéndose en la suya por este fin anunciado con premeditación y alevosía. Se le reproduce por su cabeza sin más interjección que un suspiro de ternura en el pensamiento. Se va.
Lo recuerdas todo o casi todo. Su rudo trastear , su hablar cercano , sin muchas palabras y a la vez a profundo y ronco , cortado , a medio gas... Los detalles de aquellos años, días, segundos, ..absolutamente todo se aparece como si fuera hoy mismo , con su despedida lejana y ausente . Te vas amigo, compañero, camarada, te quitas de en medio de este baile absurdo de sin panes y con circos ..tu que aprendistes a estar callado con tus fracasos académicos , tu vida llena de tu quehacer llano y simple. Tu R , tu S , tu J ... ahí están aprendiendo de ti de tu mirada amarga pero profunda.
Así se escapa , mi misma añada, tu misma edad. Paraíso perdido de una infancia chica, de un juego inocente de fragilidades balbuceante que se domestica sin querer aprender de sexo y de la vida... formando parte de una misma cosa : la existencia.
Sin embargo no hay más despedida que aquella que dejamos atrás hace más de 30 años , la que en silencio ha sabido con el tiempo manejar la noche de los placeres y callarnos las vergüenzas de la culpa y el perdón. Nada supimos decirnos para comprendernos más que el amor de dos muchachos no era más que una joya preciada para vivir con menos penas y vacíos , con menos rabia y rencores... siendo tu y yo únicos y bellamente sorprendidos por la memoria de estos días.
¿ Como hablarle ahora a tu cuerpo que es también algo mio , como manejar tu mirada azul o tu áspera piel desde tu partida ? ¿Cómo olvidarte si fuiste para mí experiencia sublime de generosidad y inocencia pura ?
Acostumbrarme a estar sin ti fue lejos de los tiempos un paraíso perdido que me en cuñó en la frágil melancolía de tus distancias y mis silencios . Hoy pienso en ti . Lo veo como si no tuviera hoy ninguna posibilidad en el momento de decirte adiós amigo. Estas todavía y ya te estoy despidiendo , te encuentro a faltar y desde hace tiempo te perdí para siempre...y ahora me llega la dura noticia de tu triste proceso final ... No diré nada como sabes , no dirás nada como sabes, callaré y callarás ... Dentro de nuestros corazones estamos juntos.