Sweden , era un país lejano para ella . Tan distante que nunca supo si quizás le fuera difícil alcanzar su sueño algún día. Aquel día se había decidido a coger el tren , mejor el tren, que el avión tan contaminante . Se acercó a la estación de su pequeño pueblo para tomar con su maleta la aventura. Su sueño que tantos años deseaba realizar. Compró el billete . Un paso más. El tren salia a las 9 de la noche y se dispuso a sentarse en el banco para esperar . El reloj marcaba a penas las 6 de la tarde . Así , el tiempo debía correr más deprisa para pasar la sensación de querer escapar de aquel run run el la barriga que la intranquilizaba. Fue como si ese lugar y ese tiempo aquel día se le convirtieran en inaguantables. Sweden , su esperanza , donde su padre estuvo de joven cuando se exilió y ahora estaba cercana a a encontrarse con las mismas calles que su padre piso a su edad. Así cuando por megafonía llamaron para acceder a la vía número 8 en el tren con destino a Zurich , ella no dudó ni un momento . aCogió un asiento cercano a la ventana para no perderse detalle. Así empezó todo . Así empezó todo con su sombra , ella se había quedado en casa , pero estaba segura así de que alguien no le fallaría esa vez.