"El hecho nuevo e interesante es que, por primera vez en Europa, después del ataque fallido en Villejuif, y siguiendo el modelo de las decapitaciones de cristianos, coptos y otros, por el Estado Islámico, ha sido el cristianismo el que ha sido atacado. Y no sólo mediante la profanación de iglesias, que no comenzó ayer, sino por un asesinato, pura y simplemente. Al Padre Hamel no lo mataron por ser francés, sino por ser cristiano, y un sacerdote. Encontrar razones económicas o políticas para su asesinato es bastante difícil.
Hay varias teorías [para explicar la radicalización de los musulmanes franceses], todas las cuales contienen una parte de verdad. Hay factores sociales y urbanos, como la marginación y la construcción de guetos; psicológicos, como el sentimiento de frustración; las secuelas de la colonización, el conflicto entre Israel y Palestina, Irak, Siria, Libia, etc. por último, está el Islam, que lo rige absolutamente todo y que está coronado por una ideología que justifica la violencia y exonera, e incluso santifica, a los asesinos".
Rémi Brague