Monarquía"Para que haya cortesanos no se precisa Corte ni soberanos. Surgen siempre alrededor del Poder, no importa en qué manos se encuentre éste. Sólo cambian los uniformes de los turiferarios".
"La verdad desnuda y aun semidesnuda es siempre poco grata para los oídos de las personas reales"
"La Monarquía constitucional es algo, lo bastante, y con ello tendremos que contentarnos".
"Dijo un día Prim en el Congreso:
Nada más difícil que hacer un rey".
"A las personas reales no les place compartir los
vivas y los elogios con nadie. Los
mueras y las censuras ya es otra cosa".
Pueblo"De tejas abajo, lo único inmenso es la credulidad humana. No tiene límites".
"Siempre estamos dispuestos a creer lo que nos conviene".
"Hay sueños de estadistas que cuestan muchas lágrimas a los pueblos".
"Los pueblos se dejan arrastrar con mayor facilidad por las ideas que menos comprenden".
"Es tan difícil gobernar un pueblo de incrédulos como uno de fanáticos"
Política exterior"En la política exterior sólo tienen primacía los intereses".
De las luchas políticas"Sólo es verdadera revolución la que sustituye los principios morales sobre los que se asienta la Sociedad. Las demás son motines, por grandes que sean sus estragos. Al final, las cosas quedan lo mismo".
"Las cuatro reglas de la política: suma cuanto puedas, resta lo menos posible, multiplica con cuidado y divide al adversario hasta hacerlo polvo".
"No hay habilidad que sustituya en eficacia a la fuerza".
Aprendí hace muchos años aquel proverbio castellano que dice:
La desconfianza y el caldo de gallina nunca hicieron daño a nadie."