"Aunque habló en castellano el público le seguía bien, si no el pensamiento (¿quién es capaz de seguírselo al Sr. Unamuno?), al menos la palabra. Una palabra desafectada, pero reventona de autosuficiencia filosófica".
En la revista Acción Española. Número 86 de marzo de 1936. Yo intuyo en estas palabras la pluma de su director, Maeztu.
He llegado a este número de Acción española buscando un texto titulado "C'est la faute á Voltaire", que es el segundo capítulo de este libro:
Madelin es uno de esos historiadores franceses que escribe tan bien que convence por su estilo tanto o más que por sus argumentos. En cualquier caso "C'est la faute á Voltaire" hubiera complacido a Burke y entusiasmado a Leo Strauss. -->