La cosa esta de las redes sociales te ofrece la posibilidad de elegir afinidades y de esta manera ir construyendo tu red dentro de la red, para echarla en un brazo menor y casi circunstancial de la corriente dominante, donde se encuentran personas como Daniel Capó con las que uno puede pararse de vez en cuando a contemplar la marcha de las estrellas y sus espacios infinitos mientras las ranas croan a nuestro alrededor sus letanías habituales.
Daniel Capó, Felizmente imperfectos