Se cuenta que en tiempos de Margaret Thatcher los conservadores quisieron honrar a Oakeshott con el título de caballero. Una semana antes de que se hiciera oficial esa dignidad, se conoció públicamente un hecho que hizo cambiar de opinión a los
tories. El septuagenario profesor había sido sorprendido por un policía teniendo relaciones sexuales con su mujer en la playa"- Jesús Silva-Herzog,
La idiotez de lo perfecto(un libro hermoso e inteligente).
A tener en cuenta que Michael Oakeshott:
1. Siempre anduvo rodeado de bellas mujeres. Una de ellas fue Iris Murdoch, que cuenta que nunca nadie le besó los pies mejor que él. Me atrevería a decir que a todas les fue infiel.
2. Fue un conservador sui generis, que es como creo yo que han de ser los conservadores. Desconfiaba del liberalismo de Hayek porque le parecía demasiado dogmático (o, quizás, porque lo entendía como un intento de construir un sistema) y del liberalismo de Thatcher. porque veía en él un exceso de fe política.
3. Un asistente a su funeral declaró que a Oakeshott le hubiera gustado la ceremonia, "porque no ha tenido nada de extraordinario".
4. Lo que más me gusta de este hombre es la tesis de que allí donde veamos a unos políticos muy serios, si escarbamos un poco, descubriremos un juego; pero un juego vivido con tal intensidad que los jugadores ignoran que es un juego.