ISigue el calor. Ya sé que es una vulgaridad esto de quejarse porque hace calor en verano. Pero hace un calor que por muy vulgar que sea, no es nada trivial. Es tan físico, que resulta metafísico.
IILargo paseo con Bruno, mi nieto mayor. Nos hemos ido de exploración por una zona muy poco transitada de Ocata, siguiendo sendas borrosas entre matorrales y zarzales. En estos últimos ya están las moras casi maduras. Es una zona asilvestrada, en la que la naturaleza no ha tardado en imponerse a lo que una vez fueron huertos caligráficamente cultivados. Aquí localicé hace tiempo abundantes restos de cerámica que sugieren la existencia de un hábitat romano. Intenté enseñarle a Bruno a diferenciar la textura de los diferentes tipos de cerámica. Cuando paseamos los dos solos me soprende muy gratamente el tipo de lenguaje que usa, a veces muy ajustado y preciso. Cuando le pregunto donde ha aprendido a utilizar una determinada palabra, ayer, por ejemplo, "hipótesis", me suele remitir a algún vídeo de internet. Le gustan mucho los vídeos de ciencias (no sólo los de ciencias, como es normal). Me hizo pensar que tan importante como aprender un término nuevo es tener la oportunidad de usarlo en el contexto adecuado. Como nos movemos en contextos diferentes, debemos aprender a usar registros lingüísticos diferentes. No creo que las palabras que usa conmigo sean exactamente las que usa con sus amigos. Y así debe de ser.
IIIDedico mucho tiempo a leer estudios recientes sobre el aprendizaje y, en concreto, sobre el aprendizaje infantil. Vuelvo así a encontrarme con un hecho un tanto descorazonador: en educación no hay teoría, por muy peregriona que sea, que no sea capaz de blandir algún estudio empírico a favor.
IVCreo que he pillado uno de esos resfriados de verano. Lo tengo aquí, okupando mi garganta y provocándome un ligero pero permanente malestar general.
VLuis Moctezuma me envió ayer el índice del achivo de Laurette Séjourné. ¡Al fin he dado con él! Muy interesante. Quizás tenga que buscar un hueco en los próximos meses para un nuevo viaje a México. La principal virtud de un investigador es la persistencia.
VINo es cierto, pero no puedo resistir la tentación de traer hasta aquí esto que dice Paul-Jean Toulet: "L'amour est comme ces hôtels meublés dont tout le luxe est au vestibule."