Esta tarde, como otras, he merendado con la pequeña L. una fruta y un yogur. Después de terminar, limpio mis dedos en su babero. Ella me mira seria y me dice: papá ¿porque te limpias la mano con mi babero? Yo le respondo: porque no tengo uno para mi. Ella se queda pensativa un instante y me dice: papá, cuando seas un niño pequeño tendrás un babero.
Bien. Por un lado ¿alguien sabe con verdad de la buena hacia dónde se derrama el tiempo? Pues no. Por otro lado y según me comentan ( :D ), esta niña es una niña de toda confianza... ¿Qué hacemos? ¿La creemos?