Escrito por Luis Roca Jusmet
Iniciativa per Catalunya/Verds ha celebrado su 10 asamblea. Me parece que van por buen camino. No lo digo por las resoluciones concretas, que pueden ser más o menos discutibles. Lo digo por lo que para mí constituyen los tres ejes fundamentales de la asamblea : El primero es presentarse como una alternativa de gobierno, no como un partido de resistencia. Me parece un buen planteamiento porque para resistir no hacen falta partidos, son los propios movimientos sociales específicos que van surgiendo los que lo hacen y deben hacerlo. En segundo lugar Pero hace falta una alternativa de gobierno, con un programa que sirva además como brújula a estos movimientos sociales. Un partido que luche por la hegemonía política y cultural y que esté abierto y sea receptivo a estos movimientos sociales.por asumir críticamente sus años de participación en el gobierno. Hay aquí una reivindicación y al mismo tiempo una autocrítica. Pero hay sobre todo un proyecto propio, que no se limita a ser el apoyo del PSC. Como no estamos en Portugal ni en Grecia quizás el PSC pueda ser recuperado o arrastrado en este proyecto pero no hay que tener demasiada confianza, aunque no sea un caso perdido como los partidos socialistas de los países anteriores. Pero el PSC va a la deriva inevitablemente porque no puede ofrecer una alternativa de izquierdas clara y global. Iniciativa/Verds, en cambio, tiene la oportunidad de ir avanzando en este sentido. En tercer lugar por no centrarse en la cuestión nacional sino en la cuestión soioeconómica, que es claramente la prioritaria, tanto desde el punto de vista de la izquierda como de la urgencia del momento.
Me parece que es un momento para reflexionar sobre lo que representa esta partido en el marco de la izquierda catalana, española y europea. Iniciativa per Catalunya comienza a existir a principios de 1987, cuando se presenta a las elecciones muncipales, pero no se configura definitivamente hasta la primera Asamblea Nacional, en 1990. El grupo es resultado de la opción mayoritaria que surgirá a partir de la crisis del PSUC abierta desde 1981. El PSUC tenía una larga historia. Empecemos por ella.Nace en 1936 como resultado de la unificación de comunistas ( vinculados a la III internacional) y socialistas. Su participación en los hechos de mayo y en la Guerra Civil son lo suficientemente complejos como para no plantearlos aquí. hay, eso sí, el oscuro asesinato de Andreu Nin, que representaba al otro grupo marxista catalán, el POUM. Durante la Dictadura franquista el PSUC ( como el PC) supo organizarse de manera efectiva hasta convertirse en el partido hegemónico del movimiento antifranquista catalán. Una de sus virtudes fue la cohesión entre la clase obrera inmigrada desde el Sur y la nacida en Cataluña. Consiguió que el movimiento obrero asumiera la reivindicación del estatut de autonomía.Tuvo algunas esciciones, que en algunos casos regresaronal partido madre ( como Bandera Roja).El PSUC consiguió en 1977 el 18,2 % en las elecciones al Parlament, así como muchísimas alcadías catalanas. Poco a poco irá descendiendo hasta el 3,9 % en1986.
Iniciativa per Catalunya se funda en 1987, principalmente por el PSUC y por un sector de Entesa dels Nacionalistes d´Esquerra. En 1997 se llamará Iniciativa/ Verds porque se fusionará con un sector de los Verds.Viene la salida de un grupo del PSUC que no quiere congelarse en Iniciativa. Sale gente valiosa, como Gregorio López Raimundo, Miguel Candel, Jaume Botey. Pero quedará en un grupo marginal que se integrará en Esquerra Unida i Alternativa. El problema es que Esquerra Unida i Alternativa está controlada por lo que queda del PCC. Forman una agrupación básicamente formada por sindicalistas de CCOO, algunos intelectuales y profesionales y cargos municipales. Será el referente catalán de IU, una vez IC/V se separa de ella.
Iniciativa/Verds tiene acumulada experiencia política. Está dirigida todavía por un sector que viene del PSUC : Joan Saura ( que deja la Presidencia pero continua teniendo un peso político), Jaume Bosch, Jordi Guillot, Luis Tejedor
( alcalde del Prat del LLobregat) entre otros. Son gente que llevan dedicados profesionalmente a la política desde la transición. Este es su lastre: han hecho de la política un oficio permanente. Lo cual no quiere decir que sea gente capaz, honesta y de izquierdas.Luego están los jóvenes dirigentes : Joan Herrera, Dolors Camat, Ricard Gomá. Gente con un compromiso claro político desde los años más jóvenes, que no han renunciado a la política. El problema es que no acaben haciendo también de la política su profesión. Para mí la democracia real implica que la política ha de ser un compromiso provisional, que no debería durar más de ocho años en términos institucionales. Los siete años que estuvieron en el Govern de la Generalitat fueron, como reconoce Joan Saura, fallidos. Lo cual no quiere decir que no fuera una apuesta necesaria. Pero el PSC no supo romper con la dinámica anterior instaurada por CiU. Pasqual Maragall se embarcó en un proyecto nacionalista liberal como el anterior, secundado y radicalizado por ERC ( que no quiere decir que fuera igual, era evidentemente más social). Montilla no tuvo proyecto. ICV hizo lo que pudo en Interior y en Medi Ambient, con sus errores inevitables. Pero creo que falló en conjunto no solo un proyecto claro de política de izquierdas sino también una alternativa institucional diferente, más austera. Eliminar estructuras como las diputaciones, asesorías, gastos evitables, dietas. No entendió que la austeridad era necesaria. Tampoco planteó alternativas claras a nivel de Sanidad y de Educación.
Pero la responsabilidad de ICV es hoy enorme. Debe ser el núcleo del SYRIZA catalán y parte del español. Para ello debe aglutinar los diversoso movimientos existentes sin querer manipularlos y debe también buscar ser una laternativa de gobierno. Para lo primero tiene como dificultad el antipoliticismo y antipartidismo de los movimientos sociales alternativos. Para lo segundo le falta el apoyo de la clase obrera inmigrante de Cataluña. necesitaría un líder sindical en sus listas. La imagen que dan los líderes de ICV no generan identificaciones entre este colectivo. Todo ello al margen de que debe contribuir una cultura alternativa al neoliberalismo hegemónico.
Pero en Cataluña tenemos un grave problema que distorisona toda esta dinámica. Es el llamado "derecho a decidir". ICV ha apostado fuerte por este derecho pero no tiene una postura común, lo cual puede ser positivo en cuanto a su pluralismo. Pero no nos equivoquemos, solo hay dos posturas. Separarse de España o seguir en España. para seguir en España hay que pensar un reforma federalista que nadie ha hecho de manera coherente, ni siquiera el PSC. Creo que valdría la pena que ambos partidos colaborarán en pensar una opción radical de reforma institucional como alternativa a la independencia. Pero sobre todo ICV debería ser un elemento de cohesión para los catalanes de izquierda y defender un programa claro de transformación social, sea en España o en una improbable ( a corto o medio plazo) Cataluña independiente. También de que este debate no ocupe el lugar prioritario, que debe ser el modelo de sociedad que queremos.