Escrito por Luis Roca Jusmet
Empezaré la reflexión sobre esta dicotomía a partir del capítulo III del libro de Georges Canguilhem
El conocimiento de la vida. El nombre del capítulo es, precisamente, "Filosofía". Intenta elaborar un trabajo filosófico sobre la base de la ciencia biológica y aquí trabajo filosófico quiere decir análisis conceptual.
La primera cuestión que plantea Canguilhem es la necesidad de una ciencia biológica emancipada de las ciencias como la física o la química, No porque la vida no sea una realidad físico-química, sino porque es una materia diferenciada. El primer obstáculo es que sean los propios científicos los que reaccionen en contra de esta planteamiento, acusándolo de vitalismo y considerándolo anticientífico. Este planteamiento formula que la versión científica es la mecanicista.
Vitalismo , para Canguilhem, quiere decir continuidad en la sucesión de formas, epigénesis en el desarrollo del ser y totalidad en el planteamiento.
Mecanicismo quiere decir discontinuidad, performación y atomismo. El vitalismo tiene filiación aristotélica, pero sobre todo hipocrática. La consecuencia médica es la
natura medicatrix, es decir la potenciación del organismo y de sus sistema defensivo como defensa frente a la causa mórbida. El vitalismo expresa la confianza del viviente en la vida, es una exigencia moral. El vitalismo es la visión dominante de la antigüedad y del renacimiento. Pero continúa después de la revolución científica de Galileo y Newton, y teorías como la del reflejo se basan en su planteamiento. o en la propia neurología.El vitalismo clásico ( S.XVII-XVIII) acepta la inserción d ela vida en un medio físico.
No se ha intentado explicar el funcionamiento de las máquinas en función de los seres vivos sino explicar lo vivo a partir del funcionamiento de la máquina. Pero los seres vivos, exceptuando los vertebrados raramente se explica su funcionamiento por mecanismos. la máquina es una construcción artificial del hombre. Los movimientos mecanicos son geométricos y mensurables. Pero el mecanismo necesita un motor, una fuente de energía. Aunque el téorico del mecanicismo es Descartes incluso podemos encontrar en Aristóteles analogías entre las máquinas y los movimientos d elos animales. La teoría mecaniscista de Descartes se basa en su dualismo mente-cuerpo. El cuerpo se entiende como una máquina, no hay diferencia entre un cuerpo animal y un autómata. Pero Descartes hace con el animal lo que Aristóteles hacía con el esclavo, que definía como una máquina animada. hay una deasvalorización en los dos casos para utilizarlos como instrumentos.la mecanización de la vida y la utilización mecánica del animal son inseparables.La teoría del animal-máquina está ligada a la existencia de Dios, como creador. Pero un organismo es autónomo, cosa que no sucede en la máquina. Hay autoconstrucción, autoconservación, autorregulación y autorreparación. En el caso de la máquina se necesita un ingeniero para construirla. la conservación exige un mecánico que la vigile, regule y repare. Kant distinguirá con claridad el organismo y la máquina, señalando los aspectos anteriores. la máquina es una creación humana y, por tanto, un producto de la vida. Pero no funciona igual y sería un grave error intentar reducir la vida a la máquina, mucho más limitada.
¿ Cómo se plantea el debate hoy ? No puede resultar útil el planteamiento de un importante biólogo inglés contemporáneo, el británico Brian Goodwin. En un sugerente libro,
Las manchas del leopardo.La evolución de la complejidad, nos da la clave. Los mecanicistas actuales en biología son los que lo reducen todo a lo molecular, a lo genético. Los vitalistas actuales defiende que la vida no es un mecanismo a partir del organismo como únidad básica. Los mecanicistas han eliminado el organismo. Pero es partir de la noción d eorganismo como podemos entender
lo vivo.Y los biólogos Marturana y Varela con su idea de la autopoeisis como lo propio del ser vivo. Autopoiesis quiere decir autonomía, autocreación, reproducción y autoreparación. Los seres vivos se construyen a sí mismo en una relación que los separa del entorno a la vez que lo liga a él. Lo vivo es radicalmente diferente de lo mecánico, en definitiva. El vitalismo no es entonces un planteamiento metafísico frente a la ciencia sino una manera de defender un paradigma científico frente a otro.