Pensamientos diversos sobre el cometa Pierre Bayle ( Introducción y traducción de Julián Arroyo Pomeda )
Madrid : ediciones Antígona, 2015
Escrito por Luis Roca Jusmet
A primera vista puede resultar increíble que se publique un libro de un pensador casi desconocido, Pierre Bayle, que habla sobre la llegada de un cometa a la Tierra. Increíble porque cualquiera podría pensar que, con mucho, puede interesar a cuatro especialistas. Pero hay que vencer este primer prejuicio para entender que lo que nos enseña este libro es a razonar. Lejos estoy de considerar que se cumplió el deseo de Kant de que a finales del siglo XVIII los humanos íbamos a madurar, a huir de los tutores y guías y a pensar por nosotros mismos. Más bien parece que se cumplió la irónica profecía de Chesterson : "Cuando dejéis de creer en Dios creeréis en cualquier cosa". Quizás los humanos tenemos más tendencia a la creencia que a la verdad. En todo caso Pierre Bayle forma parte de un grupo de pensadores muy potentes del siglo XVII, que hacen todos ellos un esfuerzo preciso, creativo y continuado para construir una nueva racionalidad. Son filósofos como Descartes, Spinoza, Leibnitz o el mismo Bayle. Gente que hacía de la filosofía una forma de vida, porque la ética de la verdad guiaba sus vidas. Hablamos de la gran época del Barroco. Algunos, como Descartes, hacían de su experiencia en el mundo un camino para el aprendizaje filosófico. Otros, como Leibnitz, formaron parte de la vida cortesana y fueron ampliamente reconocidos en su tiempo. Bayle, como Spinoza, forman parte de los que vivieron su experiencia filosófica en la soledad e incluso en la persecución y murieron de enfermedad común bastante jóvenes. Y no es esta la única analogía que podemos hacer entre Spinoza y Bayle, con un método matemático de razonar detrás del cual no había un razonamiento muerto y rígido sino uno bien vivo y flexible.
Este texto nos enseña un método racional que no está desligado de la experiencia. Es la búsqueda de la filosofía de encontrar una manera de pensar crítica pero inmersa en los procesos reales que se dan en el mundo y no en entelequias abstractas. A partir de una reflexión sobre la llegada de un cometa a la Tierra y la crítica a los supuestas desgracias que ello producirá. Hay por una parte una crítica muy rigurosa a lo que entendemos por una relación de causa-efecto que es muy interesante. Desde aquí demuestra que la llegada de un cometa no puede ser causa eficiente de ninguna desgracia humana. Hay, por otra parte, una crítica a la teoría de los signos, muy de moda desde el renacimiento y que acabará con la victoria de la astronomías sobre la astrología, en la que podemos enmarcar este escrito. Pero hay muchos otros temas que son tratados aquí como la manera en que lo políticos manipulan al pueblo a partir de las expectativas positivas ( esperanza) o negativas ( miedo) sobre el futuro. Igualmente la consideración de que las acciones humanas están sujetas a sus pasiones. Son estas las que nos hacen buenos o malos, más que el ser creyentes o ateos. Bayle argumenta a partir de la experiencia común que no es cierto que los creyentes sean más buenos que los ateos. El libro presenta así unas argumentaciones impecables que tienen mucho que enseñarnos. No nos olvidemos que la filosofía y la historia de la filosofía son, en definitiva, lo mismo. Son los filósofos los que han construido los problemas y las argumentaciones filosóficas. Es muy útil no solo pàra el filósofo sino para cualquiera que quiera aprender a pensar desde el ejemplo de lo que han sido capaz de hacerlo libros como este. La edición, por otra parte es impecable, al igual que la introducción y la introducción de Julián Arroyo Pomeda, a quien hemos de agradecerle el esfuerzo que tiene como resulatado este regalo para la inteligencia. Como decía Freud la voz de la razón es débil pero clara. Las pasiones humanas y las creencias derivadas de ella hablan fuerte pero solo generan confusión. Libros como este ayudan a esta lucha, siempre viva, por la racionalidad.