Escrito por Luis Roca Jusmet
La teoría ontológica de Zizek no solo tiene unas bases lacaniano-hegelianas. También surge de reflexiones sobre otros filósofos contemporáneos, como Gilles Deleuze. pero no solo de la lectura directa de los textos de estos filósofos sino también de literatura secundaria que no conocemos los que no dominamos el inglés, como es el caso de los sugerentes estudios de Michel DeLanada sobre la ontología deleuziana, que Zizek también señala en el artículo que nos ocupa sobre Deleuze.
Zizek habla del emirismo trascendental de Deleuze, que considera que la realidad es un espacio virtual de potencialidades singulares y múltiples. Una especie de campo virtual cuya fuerza generadora se actualiza en lo material. Otra cuestión que se me plantea ( a mí, no a Zizek) es si no estamos hablando de una nueva versión de la teoría hilemórfica de Aristóteles, de la materia/forma y de la potencia/acto. Pero esto es ya otro tema en el que aquí no entraremos.
Lo que plantea Deleuze, en todo caso, nos lleva a un antagonismo interno porque puede explicar desde dos lógicas contrarias. Una es considerar que lo virtual es lo posible, el devenir que va produciendo los seres a partir de una virtualidad anterior. El tiempo es este devenir siempre pasado y eternamente por venir. Lo virtual es el proceso que va generando las realidades constituidas. El Todo real es entonces el resultado de la actualización de lo virtual precedente. Zizek considera que esta es la línea más propiamente deleuziana, aunque siempre manteniéndola en tensión con la lógica del ser, que considera que hay una continuidad del espacio-tiempo virtual que está determinada por la negación ( como diría Spinoza). Lo determinado es entonces el acto, que va diferenciando estructuras espacio-temporales reales y discontinuas. Hay algo real que es anterior a la virtualidad. Hay un real que precede a lo virtual y lo virtual se extrae de este real anterior. A partir de la inlfuencia de Guattari ( claramente negativa para Zizek) Deleuze se orienta hacia el ser más que hacia el devenir. Sería como la cinta a partir de la cual se van pasando las imágenes virtuales.
El trasfondo metafísico de estas dos lógicas es primero la del idealismo trascendental ( de Kant o Fitche) y segundo la del realismo de Spinoza y Schelling.
Zizek continuará la reflexión a partir de una serie de datos científicos.que ponen de manifiesto la complejidad actual entre idealismo/ materialismo. Para la información digital la materia es información. Para la biogenética la materia es un código. Para la revolución cuántica es la materia reducida a una curvatura del espacio ( teoría relatividad) o a oscilaciones virtuales ( mecánica cuántica). Incluso podríamos plantear que los elementos son nudos de estas oscilaciones. tenemos también la noción de campo y algunos científicos plantean que la conciencia es un campo del cerebro. Es una especie de encuentro entre un idealismo post-metafísico y un materialismo espectral. La materia parece reducirse al vacío. ¿ o sería, planteo yo, la Substancia de Spinoza ?
Todo esto nos remite a un Real, dice Zizek, que es el Real simbólico, el científico d elos procesos materiales matematizables.