Escrito por Luis Roca Jusmet
Al margen de los dos libros dedicados a la política ( Tratado teológico-político y Tratado político ) es interesante complementar estos textos con la parte cuarta de su Ética
dedicada a "La servidumbre humana y a la fuerza de los afectos." Vamos a ver las conceptualizaciones interesantes para la política.
PRIMERA CUESTIÓN
Desmontaje de ficciones. Hay que mostrar que utilizamos una serie de conceptos ficticios, y que son por tanto ideas inadecuadas. Por una parte el de Perfección. La perfección es una proyección humana basada en la creencia de que las cosas naturales se mueven por fines, cuando estos no son más que expresiones del deseo humano. Los humanos deseamos y los fines son aquellos actos orientados a la consecución de lo que queremos. La perfección es entonces un modelo ideal inventado por el hombre. En este sentido lo único que tiene sentido es darle un sentido relativo. Una cosa será más o menos perfecta en la medida que se aproxime o no al modelo ideal que formulamos. Por otra el de Bondad, que podemos considerar como un caso de perfección, en la medida en que consideramos bueno lo que se acerca a nuestro modelo ideal. Virtud es una ficción si la entendemos como una acción buena.
Carácter relativo de la bondad/perfección/virtud. Una acción humana solo puede considerarse buena, es decir virtuosa, si aumenta la perfección, es decir la potencia. es decir que es buena si te permite desarrollar tu capacidad, lo cual te producirá alegría. Aquí podemos relacionar lo que afirma Amartya Sen en su teoría de las capacidades. Pero también dice Spinoza que lo bueno es lo útil, lo cual nos permitiría entonces vincularlo a John Stuart Mill. De lo que se trata es de saber lo que es útil para nosotros, es decir lo que nos aumenta la potencia y nos produce alegría. También lo que es malo, es decir lo que nos disminuye la potencia y produce tristeza. Si actuamos de manera racional sabemos no solo esto sino también la causa de porque no hacemos lo que es bueno, lo cual nos permite cambiarlo. Actuar irracionalmente quiere decir hacer aquello que nos perjudica.
Conclusiones políticas. La mejor propuesta política es la que permita más igualdad de oportunidades para desarrollar las propias capacidades, y la que sea más útil, en el sentido que permita el máximo de alegría para el máximo de personas.
SEGUNDA CUESTIÓN
Derecho natural. Cada ser singular tiene derecho a hacer lo que hace, ya que el derecho depende de la potencia. Cada cual hace lo su naturaleza le permite en relación con los otros seres singulares. Si los hombres fueran racionales entonces cooperarían entre sí, pero como se dejan llevar por las pasiones entran en conflicto. Aquí no hay delito porque no hay leyes.
Estado y ley. Es necesario porque ya que nos mueven las pasiones viviríamos en conflicto permanente. Los individuos hacemos un pacto ( contrato social) que nos convierte en ciudadanos. Nuestra razón nos dice que, partiendo de lo anterior, lo mejor es elaborar unas leyes a las que debemos someternos, sea por razón o por miedo. En el primer caso la obediencia de las leyes es libre y en el segundo no. Acordadas las leyes el que no las sigue comete un delito y, por tanto, es sancionado.
Justícia. La justícia es un efecto del Estado. esto quiere decir que en un estado natural, en el que impera el derecho, nada es justo ni injusto. La justícia y la injustícia aparecen cuando se acuerdan unas leyes. Justo es el que las sigue e injusto el que no lo hace.
Conclusión política. El hombre pasa del estado natural al estado civil, lo cual quiere decir que limita su derecho natural a la ley que el Estado debe garantizar. Si las leyes se han elaborado con el fin de garantizar la libertad y la seguridad de todos, entonces consideramos justo el cumplimiento de la ley e injusto el incumplimiento. Podemos considerar que Philip Pettit recoge esta idea en su defensa de la idea de libertad como no-dominación.
TERCERA CUESTIÓN
La libertad conduce a cumplir las leyes. Si estamos de acuerdo en que es mejor y más racional vivir en un estado civil regido por leyes que en un estado natural regido por los derechos, entonces el hombre libre ( que es lo mismo que racional, que es lo mismo que sabio ) sigue las leyes porque sabe que es lo mejor. El hombre es libre en la medida en que tiene una idea adecuada de las cosas, que en este caso quiere decir entender la necesidad de las leyes y su cumplimiento. El hombre libre sabe que es mejor vivir en sociedad, en una sociedad donde los diferentes deseos cooperen en una potencia compartida. El hombre libre es además alegre y generoso.
La servidumbre conduce a cumplir las leyes por miedo. El hombre movido por sus pasiones no entiende el carácter necesario y útil de las leyes comunes y las sigue únicamente por miedo a ser sancionado, ya que las ve como una limitación a su derecho natural. El hombre movido por pasiones las tiene a veces tristes y odian a los otros al considerarlos causa de su tristeza.
En todos caso, todos ( o casi todos ) siguen las leyes, sea por razón. libremente, o por miedo, servilmente. Esto nos recuerda a Maquiavelo, cuando decía al Príncipe que las leyes se obedecen por amor o por miedo.