Sobrevivir es un arte , en concreto el arte de saber soportar y anular la vida misma. Así Arthur Shopenhauer planteaba su pesimismo. Vivir es sufrir en este caos que nos aguanta. Caer y padecer, gemir y llorar, entristecer y palidecer de fiebre, por eso el pesimismo se experimenta desde el primer instante de nuestra existencia. Negro como la noche nos cae el telón de la vida. La inconsistencia y el absurdo de la vida que experimentamos en la enfermedad inadvertida, en la muerte súbita , en el abandono un día del amor que deseamos, en el dolor inaguantable de una tarde de verano , en la depresión por estar solos en un mundo con tanta gente a nuestro alrededor... Por eso vivir ese sentimiento de absurdo y inconsistencia sólo será posible si nos confiamos a los espejismos de la publicidad terrestre con una vida regalada o bien saber reír con la insignificancia que es la vida misma sin sentir consuelo alguno más que la voluntad misma de la propia vida. Así asombrarse de lo que somos permite encontrar en la voluntad misma la capacidad de ser dolor en estado puro frente a esta banalidad que es vivir .No estamos protegidos de nada y la amenaza más grande es lo que tememos permanentemente sea la muerte, la enfermedad, el hambre, la falta de trabajo, y los demás que nos amenazan constantemente con su violencia física, verbal, moral para juzgarnos siempre desde su posición .. no somos especie alguna somos individualidades , animales de instinto y la compasión es algo exclusivo a unos pocos.
Ese egoísmo devasta la especie y nos convierte en seres hostiles con nosotros mismos y con el mundo llámese extinción de las especies ajenas, llámese destrucción de la flora, fauna, la eliminación de recursos energéticos, el deterioro del planeta .. hay una violencia natural humana , bellum omnium contra omnes así la sociabilidad que pensamos tener no deja de ser una misantropia ...soledad y promiscuidad ....
La especie de medusa que habita en nuestros mares y océanos tiene dos características inusuales en nosotros la simplicidad , carecen de cerebro y su energía es mínima en el consumo diario lo que las convierte en adaptables a todo hábitat y la inmortalidad como especie ... La primera difícil de conseguir en ese mundo nuestro y la segunda sólo la podemos soñar todavía .