En realidad no sé si se ha premiado a Quino o a un divertido hooligan de la autocomplacencia progre...
... que no es lo mismo.
En el segundo caso, los miembros del jurado de los Premios Príncipe de Asturias de Humanidades que lo han votado se habrían estado votando a sí mismos.
En el primer caso... Bernardo de Chartres hablaba de los grandes humanistas como de gigantes a cuyos hombros nos podíamos subir los enanos para ver mejor. Pues bien, yo creo que a hombros de Quino el horizonte no se dilata mucho.