A veces me encargan trabajos que son un regalo del cielo. Este ha sido el caso cuando los de la editorial Adesiara me han pedido un prólogo para la magnífica traducción que ha hecho Laura Cabré del De pueris de Erasmo. Ha sido una excusa perfecta para acudir con frecuencia a las obras del de Rotterdam y pasar muy buenos ratos conversando con él. He repasado así en su compañía todas sus obras pedagógicas. Mucho os podría decir sobre ellas, aunque, si estáis interesados en mi opinión, tendréis el libro a vuestra disposición en su momento. Hoy me voy a limitar a traer hasta aquí un mínimo fragmento de un diálogo de uno de sus Coloquios, el XV, titulado El arte de aprender. Dejaré hablar a los protagonistas sin interrumpirlos ni añadir nada a sus palabras porque a buen entendedor, pocas palabras bastan
Erasmio: Me han dicho que existe un método excelente que permite al hombre conocer a fondo, con el menor esfuerzo, todas las bellas artes....Desiderio: Promesa magnífica, ciertamente. Pero, ¿conoces a alguien que por este método extraordinario haya llegado a ser sabio?Erasmio: No....
Desiderio: Has de amar los estudios. Y después, admirar sus resultados.
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Desiderio: No conozco otro método de estudio que la entrega, el amor y la perseverancia.