Que hemos de morir, y tenemos que arreglárnoslas con nuestra finitud;
que la realidad tiene muchas dimensiones, pero no hay trasmundos (el allende no debe vampirizar el aquende);
que hemos de luchar juntos por una vida mejor, en esta única Tierra que es nuestra morada;
que la acción debe abrir espacios para la contemplación; que la contemplación no puede desentenderse de la acción;
que no hay salvación para el ser humano, pero lo que nos salva es el amor.
Jorge Riechmann, cinco cosas que deberíamos saber , tratar de ayudar, tratar de comprender, 05/02/2013