Antes de recordar el trasfondo que conduce a
Marx a sostener algo tan radical veamos algún corolario. Aunque al parecer la etimología es coincidente, la estupidez nada tiene que ver con esa estupefacción en la que
Platón y
Aristóteles situaban el origen de la filosofía. El estúpido es alguien que tiene neutralizadas sus capacidades para la percepción y el discernimiento empezando por los sentidos que pierden los rasgos específicos que tienen cuando se trata de la especie humana. El término "bêtise" usado como traducción de estupidez en francés lo expresa a maravilla: cuando caemos en la estupidez, nuestros sentidos se animalizan o bestializan, lo que permite a
Marx escribir:
"En lugar de todos los sentidos físicos y espirituales ha aparecido así la simple enajenación de todos estos sentidos, el sentido del tener. El ser humano tenía que ser reducido a esta absoluta pobreza para que pudiera alumbrar la riqueza interior [de ese tener]".
Karl Marx, Manuscritos del 44 (Tercer Masnuscrito. Propiedad privada y comunismo)
Víctor Gómez Pin,
Estulticia y deshumanización de los sentidos, El Boomeran(g), 07/05/2013