El posmodernismo académico en el fondo no repercute tanto en la sociedad, lo que hace es anular la posibilidad de resistencia de parte de los intelectuales, sobre todo, de izquierdas. Es más peligrosa la pseudociencia que se centra en las terapias alternativas de la medicina, como la homeopatía, o la religión y su enseñanza, por ejemplo, de la evolución biológica. La pseudociencia y la religión ponen en riesgo al hombre. Pero el mayor peligro, insisto, es el de las ideas de los propagandistas y políticos que las lanzan sin preocuparse por saber si es verdad o mentira lo que dicen. Solo quieren vender una política cómoda usando cualquier argumento por muy mentira que sea.
Ahí están los engaños de Bush y Blair cuando con Aznar iniciaron la guerra de Irak. Estoy seguro de que esta posverdad nos dará muchos más ejemplos durante los próximos años tal y como están las cosas.
Natalia Vaquero, entrevista a
Alan Sokal:
"Los políticos mentirosos son más peligrosos que el posmodernismo", diario información 16/04/2017
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