Estudios con la Oxitocina, la llamada “molécula moral” o “péptido del amor” indican que la moralidad llega hasta los límites del grupo. En diversos estudios la oxitocina promueve el etnocentrismo, el favoritismo hacia el endogrupo, el grupo propio, ya que ayuda a ver a los miembros del propio grupo como más humanos. Estudios de decisiones morales con los famosos tranvías así como juegos económicos en los que los participantes toman oxitocina indican que la oxotocina ayuda a favorecer a los del propio grupo.
Pablo Malo,
Nosotros contra Ellos, Evolución y neurociencias 01/09/2017
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