Escrito por Luis Roca Jusmet
En el prólogo del libro
El uso de los placeres ( volumen segundo de su
Historia de la sexualitat ) Michel Foucault presenta un breve pero denso análisis sobre la constitución del sujeto moral. Los volumenes 2 y 3 se publican el mismo año de la muerte de Foucault, después de ocho años de la publicación del primero. La gran diferencia de tiempo entre la primera y las segundas publicaciones se debe a la reorientación que Foucault hará de sus trabajos a principio de los años ochenta. Entre 1980 y 1984 Foucault dictará los seminarios que reflejan sus últimas elaboraciones, muy centradas en el estudio de los antiguos, sobre todo los griegos del helenismo y los romanos de los dos primeros siglos de nuestra era. La problemática que le interesará no será tanto la sexualidad, de inicios de la modernidad (que es lo que trata el primer volumen) sino lo que llama
el cuidado de sí mismo. Foucault afirma que el hilo conductor de sus trabajos siempre ha sido la relación entre el sujeto y la verdad. Así. ha estudiado la constitución del sujeto epistémico, del sujeto loco, del sujeto delincuente y del sujeto enfermo. ¿ Qué es el sujeto moral ? El sujeto moral no es el individuo que sigue unos valores y regles de acción que les proponen una serie de instituciones, como la família, la escuela o la Iglesia. Esto sería un conjunto prescriptivo, que llamamos moral y que siempre está presente socialmente como doctrina y como imaginario colectivo. Tampoco es la conducta en relación a este código, que puede ser de obediencia, de resistencia, de transgresión o de indiferencia. Esto es lo que llamamos conducta moral.
El sujeto moral aparece cuando se dan formas de subjetivización moral. ¿ Que quiere decir esto exactamente ? Quiere decir varias cosas : en primer lugar que se determina una sustancia ética. Es la manera como el individuo se constituye a sí mismo como materia principal de su conducta moral. Puede ser, por ejemplo, a través del dominio de sus actos o de sus deseos. La manera como entiende el modo de sujeción a este código. O la forma de elaboración del trabajo ético : un largo aprendizaje que modifica la conducta, una memorización de las reglas que aplican. Hay también una teleología del sujeto moral, en el sentido que es una acción específica, que sitúa dentro de una actitud global.
De lo que se trata, entonces, es de un sujeto que se reconoce como tal. No el que sigue un código de manera automática, digamos natural, por la autoridad de la tradición. Sería como una conducta moral reflexiva. La noción no deja de ser ambigua y nos devuelve a la diferencia entre sujeto e individuo y entre ética y moral.