Escrito por Luis Roca Jusmet
John Stuart Mill, que representa lo mejor del liberalismo,que la izquierda no debe ni puede olvidar. Propuso un criterio claro para distinguir lo público de lo privado. Las leyes deben intervenir normativamente cuando estamos en el espacio público y espacio público quiere decir, o bien problemas que nos afectan a todos, o bien que afectan a los derechos de los otros. Lo que no afecta a los derechos de los otros debe ser el espacio privado, en el que las decisiones las toma uno mismo y en el que las leyes deben regular exclusivamente la manera de hacerlo. Vivir o morir es algo que afecta a uno mismo, es un derecho básico. No podemos decidir ni sobre la vida ni sobre la muerte del otro. La eutanasia es la ley que regula el derecho a cuándo y cómo morir. No son los médicos ni las leyes quién debe decidir. Es el afectado y, en su defecto, las personas más próximas, las que se ocupan de él. Siempre regulado para que las decisión sea meditada, en el primer caso, o que no hayan abusos en el segundo.
Yo defiendo tanto la eutanasia ( no alargar la vida si el moribundo agoniza como el suicidio asistido. Y no entiendo como una sociedad liberal, sea de derechas o de izquierdas, se opone. O mejor dicho, lo entiendo pero no lo acepto. Los médicos como poder quieren tener el derecho a decidir y muchas veces se niegan siguiendo de una manera totalmente rígida el juramento hipocrático de que su deber es salvar la vida. Pero son sobre todo los poderes religiosos, en nuestro caso la Iglesia católica, quien se niega. La vida la da Dios, dicen, y solamente Él puede quitarla. esto es una creencia privada que cada cual puede tener, pero se puede imponer en una sociedad liberal que es por definición laica.
En nuestro país el PP es un partido neoconservador en lo social ( y neoliberal en lo ecónomico) vinculado a la Iglesia católica que no acepta este derecho, que precisamente el Estado debía garantizar como derecho individual a través de sus leyes. Pero el PSOE ha fallado todas las veces que ha podido legislar la eutanasia por temor a enfrentarse a la poderosa Iglesia y/o perder electorado católico. Pedro Sánchez, actual líder del PSOE, ha dicho que si ganan las elecciones regularán la eutanasia. Deben hacerlo de manera radical y con fuerte voluntad política : legalizar la eutanasia pasiva pero también la activa. Y todos los partidos de izquierda y los que se dicen liberales ( como Ciudadanos ) deben apoyarlo. La vida no es sagrada, la vida es un valor cuando el ser viviente la valora y si no lo hace, por las razones que sea, tiene derecho a morir. Y que cada cual decida según su deseo o sus creencias. Lo demás es una tiranía, sea de los médicos o de las leyes.