El ensayo es un arte arduo, casi una disciplina, pero lo es más para quien lo lee que para quien lo escribe. Este, al fin y al cabo, no tiene más que volcar una parte cincelada de su ego en una página. Pero aquel debe enfrentarse a una idea desnuda, venciendo la resistencia natural de nuestra atención a algo que ni nos alerta de un peligro, ni nos proporciona alimento; ni siquiera nos cuenta una historia. La abstracción da vértigo. Y algo de pereza. Porque requiere trabajo.
Jorge Galindo,
Black Mirror, Existential Comics y los ensayos del siglo XXI, jot down smart nº 30, marzo 2018