22384 temas (22192 sin leer) en 44 canales
Un hombre camina por la playa, observando cómo las olas dejan en la arena pequeñas estrellas de mar que poco a poco van secándose al sol. A lo lejos distingue la figura de otro hombre que, en su paseo, toma con sus manos las estrellas con las que se encuentra, lanzándolas de nuevo al mar. Cuando se cruza con él no puede evitar preguntarle. ¿Por qué hace usted eso? ¿No se da cuenta de que por una estrella de mar que devuelve al océano, éste lanza a la orilla muchas más? No va a poder salvarlas a todas. Lo que hace no tiene sentido.
El hombre le mira y, sonriendo, le responde: tal vez no puedo salvarlas a todas y lo que hago no tiene ningún sentido, pero para ésta que tengo en mis manos tiene todo el sentido del mundo ¿verdad?
Y el hombre lanza la estrella de mar de vuelta al océano.
George Orwell |
Orwell escribió esta carta desde su casa en el barrio londinense de Mortimer Crescent el 18 de mayo de 1944. Dos semanas después, un misil V-1 alemán destrozaba Mortimer Crescent. Os cuento esto porque siempre me han fascinado los dos primeros párrafos de “The Lion and the Unicorn: Socialism and the English Genius” que escribió tres años antes. (En esa obra Orwell propone una revolución socialista y democrática en Inglaterra en oposición al estalinismo soviético).Me temo que, desgraciadamente, el totalitarismo está creciendo en el mundo.
Hitler pronto desaparecerá, pero sólo a costa de fortalecer a: 1) Stalin, 2) los millonarios americanos e ingleses y y 3) todo tipo de pequeños “fuhrers” al estilo de De Gaulle.
[…]
En el mundo que veo venir, en el que dos o tres superpoderes controlarán el mundo, 2+2 será igual a 5 si el “fuhrer” de turno así lo desea.
[…]
La mayor parte de la élite intelectual inglesa se opone Hitler, pero sólo a cambio de apoyar a Stalin. La mayoría de ellos apoyan métodos dictatoriales, policías secretas y la sistemática falsificación de la Historia siempre que beneficie “a los nuestros”.
Pero si uno proclama que “todo es por una buena causa” y no reconoce los síntomas siniestros, en realidad sólo está ayudando a fortalecer el totalitarismo.
[…]
Desde que la guerra contra el totalitarismo comenzó en 1936 [Orwell combatió con los republicanos durante la Guerra Civil], creo que nuestra causa es la mejor. Pero para que continúe siendo la mejor, necesitamos una autocrítica constante.
Mientras escribo esto, seres humanos muy civilizados vuelan sobre mi cabeza tratando de matarme.
Ellos no sienten ninguna enemistad hacia mí como individuo. Yo tampoco hacia ellos. Sólo están “haciendo su tarea”, como dice el proverbio. La mayoría de ellos, no tengo ninguna duda, son buena gente y jamás cometerían un asesinato en su vida privada. Por otro lado, si alguno consigue matarme hoy, tampoco tendrá ninguna pesadilla. “Están sirviendo a su país” y eso parece que les absuelve de todo mal.
Isaac Newton |
De la propaganda a la comunicación, ¿qué ha cambiado? La sociedad. Para convencer al ciudadano nif (consumidor, competidor y contribuyente) poco dado al ruido ideológico, se requieren unas formas de seducción un poco más sibilinas. La propaganda buscaba el adoctrinamiento y el encuadramiento directo: poner a las gentes al servicio de una causa, apelar a las adhesiones incondicionales, movilizar a la guerra contra el enemigo. Ahora, lo que se busca es que te compren. Que adquieran tu producto y no el del vecino. Tratando sutilmente de convertir la compra en hábito. Y esto vale para una marca o para un partido político. La ideología se ha hecho marca como el producto. Lo que permite imponer una manera determinada de entender y organizar el mundo sin que el ciudadano tenga plena conciencia de lo que significa y las consecuencias que puede tener sobre sus vidas. Cuando a la comunicación se le va la mano y la distancia entre lo que promete y lo que hace se hace exageradamente visible, se habla de demagogia y de populismo.
Las nuevas tecnologías suponen un apoyo importante para niños y adultos con dificultades de aprendizaje y necesidades especiales.
En la web iautism. info se puede encontrar un listado aplicaciones para personas con autismo que funcionan actualmente en el mercado tanto para Android como para iPad, iPhone e iPod touch.
Por ejemplo, la startup española Appically, ha creado la app Happy Geese (ocas felices), original versión de los tradicionales juegos de la oca y de escaleras y serpientes, que cuenta con una interfaz sencilla e intuitiva y dados sin números. Ayuda a aprender las vocales, colores, números y formas, favorece la concentración y enseña al niño a pasar turno.
La Fundación Planeta Imaginario está detrás de la creación de AbaPlanet, que traslada a una app el método ABA (Applied Behavior Analysis), considerado por muchos expertos como el trabajo terapéutico más eficaz para los niños con autismo. Con la app, los niños pueden reforzar el lenguaje, la motricidad fina y gruesa y mejorar su vocabulario con la finalidad de ganar independencia en su día a día.
Esta aplicación está enfocada sobre todo en personas con trastornos generalizados del desarrollo (TGD) o con necesidades específicas de lenguaje. También puede ser útil para personas con Síndrome de Down o que presenten discapacidades.
Baluh es una aplicación que permite a personas con dificultades de habla mantener una comunicación más ágil con su entorno.
Está enfocada a niños y adultos con TGD (Trastorno Generalizado del Desarrollo), como Trastorno de Rett, Síndrome de Asperger y el espectro autista, que tienen necesidades especificas de lenguaje.
También puede ser de utilidad para personas con parálisis cerebral, síndrome de down, discapacidades del desarrollo, apraxia, accidente cerebrovascular o una lesión cerebral traumática.
La Universidad Pontificia de Salamanca ha creado TINEPET, una app para móviles y tabletas que acompaña a jóvenes que sufren Trastorno del Espectro Autista o Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad, aunque también puede servir de apoyo en la educación de otros niños.
Está basada en una mascota virtual que da órdenes sencillas, de manera que el usuario, si las va entendiendo, puede ir avanzando. Trabaja diversas habilidades para mejorar déficits de comunicación, secuenciar las actividades diarias y fomentar la memoria a corto plazo.
Si quieres contribuir a la creación de este tipo de apps, puedes apoyar el proyecto de crowfunding de Aprendices Visuales, grupo dedicado a la creación de cuentos adaptados a pictogramas para niños con autismo.
Aprendices visuales, a través de goteo.org, busca apoyos para convertir su cuento El oledor explorador en una app.
Forget therapy, you're in Paris! Try a freewheeling one-on-one philosophical dialogue with a Paris-based philosopher in one of the city's legendary sidewalk cafés.
Bringing together elements of the ancient Greek elenchus, existentialist musing, modern talk therapy, and interactive performance art, this is a simultaneously novel, yet very ancient, way of engaging with philosophical ideas.
Here's how it works: You buy the philosopher an espresso, and get ready to explore the ideas of meaning, truth, God, death, fate, paradox, etc.
Rates start at 60 Euros for a two-hour session.
Contact: philosophycafeparis@gmail.com.
En 1622 el papa Gregorio XV emitió un edicto para fundar la Congregatio de Propaganda Fide, que debía propagar la fe católica en aquellos países que no la profesaban. Ese documento, cuidadosamente a resguardo tras una vitrina, es el primer uso que se conserva del término propaganda para referirse a actividades que perseguían influir en creencias, ideas y comportamientos. Como acota Noam Chomsky en uno de los vídeos de la exposición, “el término propaganda pertenece fundamentalmente al siglo XX”. Pero en la historia anterior hubo ilustres pioneros como Alejandro Magno, Lutero o Napoleón Bonaparte. En 1813 el poder del emperador francés remitía y Jean Baptiste Borely lo inmortalizaba en un retrato en el que Bonaparte se proyectaría a su gusto: debía inspirar lealtad a los suyos e intimidar a los críticos. Como contraste, junto a ese lienzo de grandes dimensiones observamos a Napoleón como no le gustaba verse: en un grabado satírico de Francisco Meseguer, realizado tras la frustrada ocupación de España en 1808, en el que Napoleón es un Don Quijote que cabalga a lomos de su inseparable Rocinante —el primer ministro Manuel Godoy— mientras trata de consolar a Sancho Panza, su comandante en España, Marshal Murat, con la promesa de conquista de las colonias en América.
Buenas, que no altruistas, son las intenciones de los Estados que en el siglo XX tomaron conciencia de que eran responsables de su ciudadanía. El laissez-faire había terminado y las técnicas propagandísticas ayudarían a garantizar la salud de la nación. A todos los Gobiernos le interesaba tener ciudadanos sanos y fuertes para que trabajasen, luchasen en sus frentes y sus arcas se ahorrasen dinero en las partidas de prestaciones sociales y tratamientos médicos. Por ello pusieron en marcha campañas para fomentar una alimentación adecuada o sexo seguro, o advertir de los peligros del tabaco, el alcohol o la conducción temeraria. “Los materiales de salud pública que reunimos son mis favoritos porque son polémicos. Los visitantes se quedan desconcertados. Preguntan: ‘Entonces… ¿Esto es propaganda o no?”, relata Cooke.
“Pensamos en propaganda y vemos su iconografía, gráfica e infame, la propaganda nazi o estalinista, pero la más poderosa de los siglos XX y XXI es insidiosa y normalmente no la reconocemos. Está disfrazada y responde a dos palabras: relaciones públicas, término inventado por Edward Bernays a principios del siglo XX porque, según él, los alemanes habían dado mala reputación a la palabra propaganda durante la Primera Guerra Mundial”, relata el veterano documentalista australiano John Pilger. Entra dentro de la normalidad, subraya Cooke, que identifiquemos como propagandísticos los coloridos carteles que Norman Rockwell pintó hace 70 años para que los estadounidenses comprasen bonos durante la Segunda Guerra Mundial, pero dudemos ante manifestaciones más actuales. “Siempre te va a costar reconocer la propaganda cuando está dirigida a ti”. Una de las máximas de Lord Northcliffe, director de propaganda en la Primera Guerra Mundial y magnate de la prensa británica, era: “La propaganda que parece propaganda es propaganda de tercera”. “Si la reconoces, es fallida. Es lo que nos pasa desapercibido lo que debería hacer saltar nuestras alarmas”, dice Cooke.
by DIGITALART/CORBIS |
Es este uno de los libros mayores del paganismo grecolatino, hecho de una refinada naturalidad cultural. Sin ella, corremos el riesgo de no ver. Por ejemplo: al describir los avatares del texto (que desde el primer momento ha estado al borde de desaparecer varias veces) el propio Greenblatt incurre en una suerte de providencialismo cultural, al retratar a Poggio (el humanista del Renacimiento que salvó el texto) como “el agente por medio del cual sucedió algo importante”. ¿No presupone esta frase una suerte de Providencia, muy contraria, por cierto, al epicureísmo?
http://jalfocea.wordpress.com/2013/07/18/1984-la-novela-distopica-que-todos-debemos-leer/?goback=.gde_2002331_member_259139118
http://jalfocea.wordpress.com/2013/07/18/1984-la-novela-distopica-que-todos-debemos-leer/?goback=.gde_2002331_member_259139118