La vida que se va deja un soplo en medio de la mano que es inútil besar. Trátelo bien, señora, no equivoque los platos que calentó y sirvió, sueños, abrigos, oscuridades, claridad, la fe que se repite, dolores en la mitad del día, bellezas que se deben quedar.
La eternidad es una idea violenta / capitalista / acumular futuro. La conciencia se libra de sí misma cuando vira su luz en las respiraciones del rocío. Fulgor de las almohadas en las que el tiempo se desnuda y el orden del amor se pierde. La noche madura / las verdades del cuerpo conocen el cortejo / las horas que se van.
Llegan los ruidos de la muerte cotidiana / México / Irak / Pakistán / Afganistán / Yemen / Somalia. Me miro sin explicaciones / soy el asesino y el asesinado. Adiós, candor, los restos de la infancia están pálidos / no hay qué darles de comer. La belleza de un pájaro dormido me trae agonías y ruego al pájaro que duerma. Sin árboles de hermosura corpórea, sin largos días de mayo.
La cárcel de la feria no tiene puertas de diamante ni candados de oro. La pena, el hambre, la guerra, la infamia, la tristeza, hasta la misma muerte / se pasean a dedos del jilguero que cae malherido. Te olvidaste del odio, la resignación, la furia, Baltasar. Las disciplinas de la humillación enfrían la vía pública y no soplan vientos de salud, los contratos posibles del encuentro entre los miedos del espíritu y los colores de una garza. La dignidad canta músicas flacas / párpados de arena / le clavan la fuente de la sangre. La indignación olvida sus fulgores. Vida, qué te hacen, vida, sola ahí, sin techo ni parábolas, en la evaporación de cualquier sueño.
A Tomás Segovia
El dolor cuece con alquimias. Los planetas empujan las ruedas de la naturaleza / Mercurio es un dragón esposo y esposa de sí mismo / fecunda en un día el veneno que mata lo que aún vive. ¿Su parte femenina se le va como quien abandona su placenta? ¿Neptuno cuida cenizas de la muerte en Ciudad Juárez, Puerto Príncipe, Sana, Veracruz? ¿El poema de la Luna y el Sol se disfraza de nube sin corona? Los ministros del ojo retoman su trabajo con bestias calculables.
Sirven un plato con porciones de belleza y veneno. La locura ocupa muchas partes en límites del plato / la deuda con lo que no somos / el tiempo fijo en su pasar / odios sin ámbar que los sacie. Tienen ojos de lince / violencias en su cultivo enfermo. Desean abrir la maravilla a pie, apenas un chorrito de la noble pasión, la que buscaba el blanco de un nenúfar en la estación más breve / a tiros si es preciso.
Los caminos del duelo eluden el deber cumplido, tienen audacias para sobrevivir / países / escondrijos de estar. La imposibilidad de borrar huellas ancla en el real con péndulos indetenibles / su semejanza con la muerte es un escándalo.
A ver, pedazos míos, hagan asamblea y decidan. Pónganse sombreros blancos y tiradores rojos, haya color para que el viejo buey se vaya. Mis muertos ponen sombras porque no tienen más remedio. Clavan dientes de jabalí, señora, besos helados en representación de otoños idos, naves que buscan algún mar.
Hay escondrijos donde el amor se pudre. Libertad, libertad, grita el camino caminado. Ninguna brisa a medianoche limpia el ojo perdido o brazo o pie que se rompió anduviéndolo. Recortaron el cuerpo del aullido, avanza en plena destrucción. Una mujer alza los brazos para reemplazar a la piedad. La pasión pedigüeña escribe lo que se va de su escritura a otras desolaciones, otros pagos y la memoria es un papel en fuego seco.
La muerte no interpreta sus textos, no lee lo que se va a llevar. Si alguna prisionera en Campo Mayo recién nacida a madre con los ojos tapados que ni a su hijo vio. Si un petirrojo que tenía deseos. Si un joven que tocaba entrañas de la música. Si el que transforma el tiempo en un qué es. Si la dolor de un hombre que llora para adentro.
¿Adónde se fueron extravagancias del paisaje / parientes del todo y de la nada / vida y muerte del toro / lágrimas en el cerebro? La diferencia última cantaba ciega en la evaporación del sí como ocultarse y el ojo intercambiable con trampas de doctrina. El sacrificio era barato y escribió cartas que arden en silencio. Las leen los prohibidos, sus furias sin amparo, aves sin pico, rosas detenidas en lo que no vinió.
A Juan Marsé
El poema que te quiero escribir, amoramor, no tiene palabra todavía. Viaja en sus negaciones y desastres como el ayer en hoy y su argumento es una llama. Nadie puede apagarla y guarda su secreto cuando tu rostro es plena maravilla. Abre todas las puertas del sujeto, sacrificios del cuándo, los círculos de dos sin redactor original.
El rebozo fue al río donde se quiere más / crecieron plantas de irse. Apagaron la rosa y su consuelo / la sombra de la rosa / cubre rincones de la cuna / pieles vírgenes / caballos de aire que se quedan. Aromas del pensamiento líquido tocan oídos ciegos. La que llora de cruz inalterable carga con besos rotos / gana batallas que perdió.
A Chavela Vargas
In memoriam. Ciudad de México, 5 agosto 2012
Me cavo para no encubrirte más con visiones de tu abrigo largo. Un parpadeo dura mucho cuando se aparta el ser de sí en vuelos sin rumor. Libre aún entre muros de cemento y cal viva / arrojado a que nunca fueras certidumbre.
A Marcelo
¿Y si la poesía fuera un olvido del perro que te mordió la sangre / una delicia falsa/ una fuga en mí mayor / un invento de lo que nunca se podrá decir? ¿Y si fuera la negación de la calle / la bosta de un caballo / el suicidio de los ojos agudos? ¿Y si fuera lo que es en cualquier parte y nunca avisa? ¿Y si fuera?
Juan Gelman, Hoy, Visor, Madrid 2014
[cultura.elpais.com]
Milestone Project 2014 |
Nací en los Países Bajos y vivo en Atlanta (EE. UU. ) desde hace 30 años. Soy profesor de Psicología en la Universidad de Emory. Casado, sin hijos. Debemos regular el capitalismo y releer el libro sobre la empatía de Adam Smith. Para mí la pregunta es por qué existen religiones
Frans de Waal |
Los estudios de comportamiento animal, afirma De Waal, dejan claro que la ayuda mutua, la empatía, el altruismo y también la angustia por la muerte de un congénere no son excepción en la conducta de muchas especies, sino la regla. Y no lo dice cualquiera: De Wall está considerado una eminencia en su especialidad, la inteligencia social de los primates. En su último libro, El bonobo y los diez mandamientos, que publica la colección Metatemas de Tusquets para celebrar los 30 años del sello, argumenta con estudios muy solventes cómo los primates distinguen entre lo correcto y lo incorrecto; por tanto, la moral humana es parte de nuestra historia natural, de la biología.
Centramos hoy la atención en la Olimpiada Filosófica de España, que reunió a buenos estudiantes de filosofía de doce comunidades distintas. Los trabajos que escribieron los finalistas se pueden consultar a través de Internet desde hace unos días. La pregunta en la modalidad de disertación era la que encabeza la anotación: ¿Es posible vivir sin filosofía? Los finalistas elaboraron convencidas defensas de la filosofía. No sé si era esperable otra cosa teniendo en cuenta las condiciones pragmáticas de la pregunta, en el contexto de una Olimpiada Filosófica de España, con correctores que son profesores de filosofía y en un momento en el que hay aprobada una reforma educativa que planea una reducción drástica de la filosofía. Hubiera uno esperado quizás un poco más de fuerza nietzscheana en el envite: mal iría un saber cualquiera que se presente como crítico si no es capaz de aplicar ese pensamiento interrogador a sí mismo, algo que es precisamente muy filosófico. Y bien se podría entonces aceptar, aunque solo sea como posibilidad, que por supuesto que sí. Es posible vivir sin filosofía y no son pocos los que lo hacen.
Juguemos a ser sociólogos y veámoslo estadísticamente: de casi siete mil millones de seres humanos, ¿cuántos dirían que necesitan de la filosofía para vivir? Un minoría, sin duda. Para empezar porque hay sociedades en las que no hay una tradición filosófica: abrazan más bien formas de pensamiento que muchos dudan en calificar como filosóficas. Y para continuar, porque incluso allí donde se ha cultivado este extraño saber hay muchos que la denigran y rechazan como una pérdida de tiempo. ¿Será acaso una actitud de soberbia intelectual, que seguramente inoculamos a los alumnos en clase, el afirmar que no se puede vivir sin filosofía? Parece que en el gremio filosófico se viva con una especie de acuciante angustia o complejo de inferioridad: jamás he escuchado a un profe de lengua o matemática afirmar que no se puede vivir sin conocer sus materias. Es difícil si quiera adivinar qué nos empuja entonces a identificar la enseñanza filosófica como algo necesario. Se puede responder, claro está, que incluso quienes viven sin filosofía y jamás la estudiaron cuentan para sí con una concepción de la vida y que tienen respuestas más o menos claras (o difusas) sobre cuestiones filosóficas fundamentales. De acuerdo, pero si esto es así, si tienen ya una filosofía quienes no la han estudiado, habría que cuestionarse el para qué de ese estudio o si la enseñanza filosófica debiera partir entonces de esa “prefilosofía” que todo ser humano lleva consigo.
Pues parece entonces que no: la filosofía no es necesaria para la vida y se puede vivir sin ella. Librados entonces del yugo de la necesidad, no exento de cierto aroma aristocrático y autoritario, podemos construir seguramente una fundamentación de la filosofía más humilde, pero más acorde a la realidad. Se puede vivir sin filosofía, igual que se puede vivir sin música, sin arte, sin ciencia o sin religión. Pero algo valioso han de encontrar los seres humanos en cada una de estas para querer convertirlas en compañeras de camino. Y es aquí, creo, donde sí podemos dar razón del por qué de la filosofía. En pocas palabras: aunque se pueda vivir sin filosofía, se vive de otra manera con ella. Nuestra tarea consiste en mostrar, si lo queremos expresar en términos económicos, el “valor añadido” que le pone la filosofía a la vida humana. Y conviene desterrar la palabra necesidad: si la propia filosofía se encarga de mostrarnos la pluralidad de formas vida y culturas, es ridículo pretender afirmar que en todas ellas hay algo así como filosofía, a no ser que entendamos esta palabra en un sentido tan tremendamente amplio que al final se vacíe de significado, de manera que tan filosófico sea el proverbio árabe, como la obra de Hegel o el cuento de Bucay. Larga vida entonces a la filosofía, pero “reloaded”: a la altura de nuestro siglo habría que dejar atrás ciertas actitudes de orgullo o soberbia intelectual, y admitir que en esa pluralidad de vidas caben también las de aquellos que ni tienen filosofía ni la desean tener. Nadie se atrevería, creo yo, a decir que estos no son humanos o que lo sean en un sentido menor al resto.
Milestone Project 2014 (Pensament) |
La Universidad de Columbia ha hecho público el informe MOOC: expectativas y realidad (MOOCs:Expectations and Reality), que aborda los objetivos de las instituciones que pusieron en marcha este tipo de iniciativas de formación y cómo se espera que evolucionen.
Los expertos en educación superior han planteado en los últimos años la necesidad de realizar cambios drásticos para hacer posible el acceso a un mayor número de alumnos a un coste menor, y sustituir la acumulación de conocimiento por la aquisición de habilidades. Los Cursos Masivos en Línea (MOOCs) parecían el camino adecuado para lograr esos propósitos.
Objetivos de las instituciones educativas al crear MOOCs
La aparición de los MOOCs ha provocado que muchas instituciones educativas se replanteen su estrategia con respecto a la enseñanza en línea. Algunas han creado sus propios MOOCs, otras han ofertado ciertos MOOCs ya creados, y las hay que han hecho ambas cosas. Pero todas ellas persiguen, sobre todo, los objetivos siguientes:
Coste real de los MOOCs
Aunque los MOOCs han ayudado a las instituciones a conseguir los objetivos que se habían propuesto, hay que valorar el coste económico que ha representado esta opción en comparación con otras posibles. Los mayores costes de producción de un MOOC corresponden a:
En principio, se considera que los MOOCs pueden contribuir al desarrollo de la personalización del aprendizaje, pero para lograrlo se requiere un gran nivel de coordinación y la colaboración de verdaderos expertos en el tema. Esto supone un incremento notable del coste de mantenimiento.
La cuestión es comprobar si, tal como se pensó en un principio, el coste de relanzar un MOOC, una vez hecho, es realmente mucho menor que la primera vez que se ofrece. Al parecer, por el momento, para algunas instituciones aún no resultan rentables.
¿Qué hacer para mejorar la eficacia de los MOOCs?
El informe aporta una serie de recomendaciones que pueden contribuir a mejorar la eficacia educativa de los MOOCs. Destacan las siguientes:
Consultar el informe completo MOOCs:Expectations and Reality.
Terminamos el repaso personal a las tareas de la última olimpiada autonómica, comentando el dilema quizás más complejo de todos los que se plantearon. Decía lo siguiente:
Wikileaks
En 2005 se puso en marcha Wikileaks, una plataforma on-line basada en el software de Wikimedia, destinada a la publicación y difusión de información clasificada de gobiernos, grandes empresas e instituciones. En todos estos años ha puesto en circulación información clasificada y comunicaciones secretas de la guerra de Irak y Afganistán, de relaciones
diplomáticas entre países, etc.Preguntas a resolver: Publicar información que no pretende ser compartida por sus propietarios: ¿es libertad de expresión? ¿Vale más esta libertad de expresión o la seguridad del estado, que según algunos estaría en peligro por las filtraciones de Wikileaks? ¿Cambiaría en algo tu postura si Wikileaks filtrara, por ejemplo, tu actividad en la web, haciendo públicas las páginas que visitas, los correos que envías y tus conversaciones en las redes sociales?
Wikileaks es un contrapoder. Y esta palabra nos deja bien claro de qué va la cosa: tiene algo de contra, y por tanto molesta al poder establecido, pero tiene también algo de poder. Es decir, debemos mantener una cierta distancia crítica respecto a sus movimientos y debe tener cuidado con lo que publica en su web, pues lo que está en juego es precisamente su credibilidad. Es posible, como siempre, analizar el tema utilizando la balanza del pensamiento. Por un lado, está la actuación del estado que suele caracterizarse por su opacidad. Aquel lema que se ha calificado de “despotismo ilustrado”, todo por el pueblo pero sin el pueblo, no ha dejado de funcionar pese a la sustitución de las monarquías absolutas por la democracia. El poder político, que debería tener puesta su mirada en el bien común, opera a nuestras espaldas, y en ocasiones lo hace de forma sucia y seguramente inaceptable para los ciudadanos que soportan dicho poder. Y aquí tiene sentido la labor de Wikileaks, convertido en una especie de panóptico digital de los estados y las grandes corporaciones.
El otro lado de la balanza es precisamente el que convierte a Wikileaks en un instrumento tremendamente poderoso. Volvemos a la vieja pregunta: ¿Quién vigila al vigilante? No hace falta referirse a una de las mejores novelas gráficas de la historia para recordar que si el vigilante no es vigilado antes o después comete excesos. Y a este respecto el poder de Wikileaks no está sometido a control ninguno. Dicho de otra manera: si Wikileaks abandera el movimiento en favor de la libertad de expresión y la transparencia, quizás necesitaríamos un Wikileaks-2 que controle a todos los que toman las decisiones estratégicas dentro de la web del chivatazo virtual. Y así podríamos ir hasta el infinito, con Wikileaks de diferentes niveles controlando a los inmediatamente inferiores. Es indudable que Wikileaks cuenta con la adhesión de buena parte de la red, y que sus actuaciones hasta ahora pueden parecer más limpias que las de cualquiera de los estados cuya información ha sido revelada. Esto, sin embargo, no convierte a Wikileaks en una entidad con patente de corso, y habría que estudiar y conocer a fondo qué se publica y por qué. Si tan a favor estamos de la libertad de expresión, ¿soportaría Wikileaks un examen a fondo de sus políticas de publicación de secretos? Pregunta que bien nos puede llevar, por cierto, a las tesis que van apareciendo en los libros del Byung Chul-Han, uno de los filósofos de moda: vivir en la sociedad de la transparencia nos termina haciendo más daño que beneficio. Quizás no sea bueno querer saberlo todo siempre, entre otras cosas por la eliminación de un concepto inherente al ser humano: privacidad. Intimidad.
Le mouvement Podemos, dont les statuts ont été déposés au mois de mars, vient de faire élire au Parlement européen une jeune équipe de cinq députés, incarnation des travailleurs précaires, des universitaires ou des petits fonctionnaires ancrés dans la réalité d’une crise économique loin d’être terminée. Podemos est issu du mouvement des Indignés de 2011 ce qui explique la jeunesse de ses militants qui, bien souvent, ne dépassent pas la trentaine.
Dimanche, le parti a réussi à rallier 1,2 million de voix, talonnant ainsi la gauche de la gauche espagnole menée par Izquierda Unida, qui ne s’y attendait pas plus que l’ensemble des observateurs de la vie politique espagnole.
C’est que les Indignés ont désormais un chef en la personne de Pablo Iglesias, trente-cinq ans, jeune professeur de sciences politiques à l’université Complutense de Madrid. Le jeune homme bénéficiait déjà d’une grande popularité acquise sur les plateaux TV auxquels il était régulièrement invité avant même de se lancer dans l’aventure.
De fait, ce brillant orateur a su arracher nombre d’électeurs aux partis de gouvernement. Dans son discours de victoire, Iglesias s’est fait le porte-parole des sans-voix victimes de l’austérité : « la femme seule qui travaille vingt-heures par jours », « ceux qui servent des verres », employés dans le secteur de la restauration où le travail au noir est quasi-généralisé, ou encore « les voisins qui franchissent les limites de la légalité » pour empêcher les forces de police à procéder à l’expulsion d’une famille sans le sou. À plusieurs reprises, Pablo Iglesias a insisté sur la nécessité de « reconquérir la souveraineté » du peuple, précisant que l’Espagne ne doit pas être « une colonie de l’Allemagne ».
Deux ou trois détails, cependant, sonnaient faux à l’oreille du démocrate, tranchant avec la belle émotion provoquée par cette marée démocratique. Ainsi, le foulard rouge et l’inévitable « no pasarán » crispent la société dans une éternelle guerre civile. Surtout, tout à la joie de saluer une « jeune génération » dont la raison d’être serait de redresser le pays, Pablo Iglesias a formulé une curieuse proposition : celle de voir mettre en place un « processus constitutionnel » comme pour dénier toute légitimité démocratique aux institutions issues de la transition démocratique espagnole. Pablo Iglesias, dans son premier discours de vainqueur, venait d’oublier à quel système il devait la liberté qui lui permettait d’être là où il était, dimanche soir, plaza Reina Sofía à Madrid. Un leader à la Chavez est-il né ?
Casi darían ganas de volver al blog con aquello de “decíamos ayer..”. Pero ni pasó tanto tiempo ni fueron tan dramáticas las circunstancias, así que será más que suficiente con retomar el tema que nos traíamos entre manos, que no es otro que comentar por aquí algunos de los ejercicios de la pasada olimpiada filosófica de Castilla y León (después tocará hincarle el diente también a la de España). El tercer dilema moral decía lo siguiente:
Las caricaturas de Mahoma
En 2005 el diario danés Jyllands Posten, de carácter conservador, publicó una caricatura de Mahoma, en la que se insinuaba que éste podía guardar una bomba debajo de su turbante. El artículo versaba, además, sobre la libertad de expresión y la autocensura a la que se ven obligados humoristas, artistas, periodistas y escritores para no herir ciertas susceptibilidades. La caricatura fue considerada ofensiva por muchos grupos musulmanes a nivel mundial: no sólo representaba a Mahoma, hecho que está prohibido en el islam, sino que además lo asociaba con la violencia. Se sucedieron los conflictos diplomáticos y las amenazas, que cristalizaron en diversos atentados en varios lugares del mundo. Siete años más tarde, el diario satírico francés Charlie Hebdo volvía a publicar unas caricaturas de Mahoma, que provocaron también múltiples conflictos y enfrentamientos, algunos de ellos de en países bien lejanos de Francia.
Preguntas a resolver: ¿debe un humorista gráfico renunciar a publicar imágenes de Mahoma?
¿Son estas imágenes un ejercicio de libertad de expresión?
Reaparece el problema de la libertad de expresión y el respeto a las creencias religiosas. Es bien sabido que en el islam no se permite representar a Mahoma y no menos sabido es que ciertos caricaturistas disfrutan convirtiendo en tema central de su actividad aquello que puede ofender a un grupo social determinado. El conflicto está más que asegurado y desde posturas más moderadas puede parecer que exageran unos al ofenderse tanto por el hecho de que alguien pretenda dibujar a su dios, pero también los otros, firmes defensores de que su libertad de expresión va indisolublemente unida a la posibilidad de pintar a Mahoma, como si no hubiera otros temas a los que enfrentarse desde la viñeta diaria o semanal. El victimismo como pose conduce a un resultado nefasto: bien saben los que profesan el islam que hay corrientes dentro del mismo que abogan por un aperturismo y una reinterpretación de los textos y que en nada se ofenden si ven una representación de Mahoma. Por su parte, los propios caricaturistas podrían dirigir su ojo y su lápiz hacia otras realidades, si de verdad quieren mostrar su compromiso con el pensamiento crítico.
Se trata en definitiva de una posición de madurez moral e intelectual, que tantas veces se les exige a niños y adolescentes, pero que se echa de menos también en el mundo de los adultos. No hay diálogo intercultural ni convivencia posible si nos dejamos llevar por la provocación como moneda de cambio. Hay quienes provocan con dibujos y quienes lo hacen con disturbios y atentados. No estamos, evidentemente, hablando de una respuesta proporcionada, y esto bien podría inclinar la balanza del lado de los caricaturistas. Sin embargo, pierden toda la razón que pudieran tener cuando se empeñan en la mofa y la humillación, y cuando en lugar de construir puentes para el cuestionamiento están poniendo las bases para el odio mutuo. Fijémonos si no en la gran diferencia que hay entre la caricatura-provocación y la crítica. Cuando son los propios integrantes de países islámicos los que hacen daño, y no precisamente por pintar a Mahoma, sufren el daño en primera persona. Ellos son los que abanderan el pensamiento crítico y los que se la juegan en cada viñeta. Y no aquellos otros que ven los toros desde la barrera y desde un sofá de Dinamarca o de París pretenden reírse de lo atrasados que son ciertos creyentes, por rechazar si quiera la opción de representar a su dios o su profeta. Si lo primero es auténtica libertad de expresión, lo segundo es un escupitajo en la cara, que pretende hacer pasar por libertad de expresión lo que es falta de respeto.
Aleshores apareixerà algun sociolingüista i dirà que la mare de la mare o del pare tenia en la cultura llatina un paper especial, no exercit pel pare del pare o de la mare, però que en la nostra cultura si, i per tant cal que hi hagi la flexió.Etim.: àvia ve directament del llatí avĭa, mat. sign.; però la forma masculina avi no ve tot dret del llatí avus (que seria tornat *au), sinó que és una masculinització analògica de avĭa (cfr. Meyerke Gramm. ii, 368).
En resum: la M. fa un any!La mare de la mare: mormor
El pare de la mare: morfar
La mare del pare: farmor
El pare del pare: farfar