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El café de Ocata
Esta misma mañana.
Me ha apetecido hacer croquetas de pollo, que me salen muy ricas, y estaba yo comprando un pollo.
En la pollería nos encontrábamos la pollera y yo solamente. La mujer, discreta y diligente, bajita y delgada, de unos 40 años, me ha enseñado varios ejemplares para que eligiera en que más me conviniera y me ha dicho que por cada pollo regalaba media docena de huevos. Y entonces ha llegado un señor. Me resulta difícil describirlo: Unos 70 años, encanecido, barba de varios días, barriga prominente, gafas. Me he fijado en él porque nada más situarse a mi derecha ha comenzado a hablar con la pollera de cuando se murió.
La mujer ha reaccionado con tanta normalidad que no he tardado en darme cuenta de que estaban reanudando una conversación anterior que por lo que fuera habían interrumpido no hacía mucho rato.
El hombre describía de manera muy viva su experiencia. Se murió en el quirófano y se vio a sí mismo elevándose sobre su cuerpo y entrando en la luz, mientras experimentaba una gran calma. Ha insistido en la profundidad de la calma. Yo intentaba aparentar que escuchaba una confesión anodina sobre cualquier tema trivial. Pero no ha sido fácil, porque la pollera le ha contado también su experiencia de la muerte y de la luz y de cómo se elevaba y si bajaba la cabeza para la derecha veía a su madre en la habitación de al lado haciendo punto y si la bajaba hacia la izquierda, a su padre, que estaba sentado junto a su cuerpo muerto.
Me ha dado el pollo, la media docena de huevos, me ha cobrado y allí los he dejado a los dos, hablando de sus cosas.
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El café de Ocata
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El café de Ocata
Me encuentro en Mark Lilla (La mente naufragada) com una cita de El hombre sin atributos de Musil que no recordaba, pero que me viene como anillo al dedo: "Un hombre no puede enfadarse con su propio tiempo sin sufrir algunos daños". Ni con su propio tiempo ni con su propio pueblo, conviene añadir.
Veo enfados, decepciones y entusiasmos por las redes sociales, pero incluso estos últimos parecen demasiado estridentes como para no sospechar que ocultan alguna decepción. Hay tantas paradojas en los resultados electorales que cuesta hacerse con un análisis coherente de los mismos.
Por ejemplo: ¿Cómo es que el electorado independentista le quita votos a la CUP al mismo tiempo que le entrega las llaves de la gobernabilidad de Cataluña?
¿El triunfo de Ciudadanos no tiene un sabor a ocasión perdida? ¿Y no podemos decir lo mismo del fracaso de Junqueras frente a Puigdemont?
¿El famoso "cinturón rojo" de Barcelona, era rojo o rojigualda?
¿Si yo fuera un empresario con intenciones de invertir en Cataluña, estos resultados me animarían a hacerlo?
Me da la sensación de que lo que nos pasa hoy es que no sabemos muy bien dónde estamos y cuando no se sabe dónde se está no importa mucho qué camino tomar.
¿Dónde estamos?
Pues estamos en el lugar en el que alguien consiga hacernos creer que estamos. Al único que veo dispuesto -hoy por hoy- a situarnos en un lugar preciso (evidentemente, en un lugar interesado, pero eso no importa, lo que importa es que sea verosímil) es a Puigdemont.
Un amigo se enfada conmigo -es imposible escribir sobre lo que nos pasa sin decepcionar a alguien- y me pide que recuerde dos cosas:
1. Que el independentismo ha obtenido 170.000 votos menos que el constitucionalismo (no estoy seguro de que los Comunes se sientan cómodos con la etiqueta "constitucionalista", pero...
2. Que todo el que se ha presentado a estas elecciones ha legitimado el 155 (peor yo creo que eso depende de las consecuencias de las mismas).
Otro amigo me trata de exagerado por decir que la CUP tiene las llaves de la gobernabilidad de Cataluña, porque JXC y ERC pueden gobernar perfectamente prescindiendo de esta gente. ¡Ya veremos!
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El café de Ocata
Tenía intención de escribir mis primeras impresiones sobre los resultados electorales, pero me parece más sensato esperar a las segundas o incluso a terceras impresiones antes de hablar de lo que no entiendo. Prefiero hablar de Vigo, donde he pasado los tres últimos días: del sol invernal que nos ha acompañado, de la ría, del viaje a Cangas, de la comida, de la bebida... de los largos paseos... de Almoneda, la librería de viejo que he descubierto esta mañana en la rúa Joaquín Yañez.
En realidad, más que librería es una tienda de antigüedades, que reúne un poco caóticamente un batiburrillo de objetos de todo tipo y, entre ellos varias estanterías de libros muy bien seleccionados y bien ordenados.
Me he comprado el
Testamento literario de
A. Palacio Valdés y
Libertad y autoridad, de Marcelino Domingo, dos grandes sorpresas.
El librero, un gallego elegante, atento y parlanchín, se ha lamentado de que ya no quedan compradores de libros de viejo. La última generación que quedaba en Vigo, ya se ha muerto. Ahora lo que hay es hijos que se deshacen de cualquier manera de las librerías que sus padres fueron haciendo con cuidado. "¿Qué van a hacer con ellas, si desconocen el valor de los libros? Ya ni los niños entran a curiosear. No les interesan las monedas antiguas, ni los sellos. ¿Qué coleccionan ahora, los niños?". No le he sabido contestar. "Este ya no es oficio para jóvenes, tampoco. ¿Qué joven va a querer andar entre cosas viejas. A lo más pondrá una tienda vintage en una zona bien de la ciudad, eso sí."
... Bueno... sí diré algo sobre los resultados electorales: estoy de acuerdo con lo que escribió hace unos días Rachel Donadio en
The Atlantic: "Los catalanes no se ponen de acuerdo en lo qué significa 'independencia'"
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9:05
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El café de Ocata
Ayer se presentaba en la librería La Central el "panfleto" de Jordi Amat
La confabulación de los irresponsables. Llegué con un poco de tiempo y me entretuve en la sección de cómics, donde me encontré con uno dedicado a Puigdemont. No pude resistir la tentación de echarle una mirada.
La portada:
La última página
"
En Bélgica he podido comprobar cómo flamencos y valones se odian en cordial harmonía. Este es el futuro que quiero para Cataluña".
Ha habido abundantes ejemplos de irresponsabilidad en esta campaña electoral. El primero, a mi parecer, nos lo han proporcionado quienes han defendido explícita o implícitamente que no somos UN pueblo, sino dos. Si esta tesis se impone, habría fracasado la estrategia que se marcó el PSUC en la transición con su lema "Un sol poble" (Un solo pueblo) y que Jordi Pujol se jactaba de hacer suya. Este sí que sería el fin del "régimen del 78" en Cataluña, que tanto parecen desear los aprendices de brujos.
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9:41
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El café de Ocata
"Un día llegó al estudio de Whistler una nueva discípula y se puso a pintar un paisaje con magnífica púrpura y verdes estupendos.Whistler mira el lienzo y pregunta:- ¿Qué está usted pintando?Ella entorna sus verdes ojos soñadores y responde:- Pinto la Naturaleza tal y como se me presenta. ¿No es esto lo que debe hacerse, señor Whistler?- Bien, bien -responde el maestro-. Pero no olvide -le hace observar- que la Naturaleza no se presenta nunca como usted la pinta"
Federico M. Alcázar, "Teatro de acción y teatro de ideas", en Espíritu Español.
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18:30
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El café de Ocata
Viaje a Madrid. Frío navideño, que es lo corresponde en esta época del año, y cordialidad, que es lo habitual en esta ciudad.
En la
Librería el 7 (Moratín 30) me topé con dos libros.
El primero,
Lo que siento y lo que pienso, no lo compré por el autor, que no conocía, sino por el prologuista, el buen Zozaya. Su lectura me confirma la idea de que hay que buscar entre los abuelos las palabras que necesitamos para explicarnos a nosotros mismos lo que nos pasa.
El segundo es este otro, más conocido, de Federico M. Alcázar:
- ¿Le gusta a usted Alcázar? -me pregunta el librero, un hombre simpático, pero que se queja de que ahora la juventud no conoce a nadie, porque no lee.- Sí, un poco...- Tiene un libro muy bueno sobre tauromaquia.-
Tauromaquia moderna.- O sea, que lo conoce.
Federico M. Alcázar tenía la peculiaridad de ser a un tiempo filósofo (escribió unas
Observaciones sobre el origen de la filosofía racionalista y su ilusión era ser profesor de filosofía en un instituto), pedagogo (fue maestro -confiesa- "en varios pueblos de las riberas del Júcar y de la vertiente sur de la sierra del Segura" y autor de
El problema de la educación), crítico taurino (
Sánchez Mejías. El torero y el hombre;
Tauromaquia moderna;
Toro, torero y afición...)...Salí dejando en los estantes el "Curso de filosofía" de Juan Zaragüeta. Pero ya me tengo domado y me pongo un tope de gasto cada vez que entro en una librería de viejo. Sin embargo el abandono de un filósofo al que ya nadie recuerda, me producía una cierta mala conciencia. Para compensar la deslealtad de la renuncia, el destino ha querido que al llegar a casa me haya encontrado con un regalo que me han enviado de lejos:
¡Qué bien que las cosas encajen!
Posiblemente eso que llamamos felicidad consiste en esto, en la experiencia de que las cosas encajan y que nada (o casi nada) sobra, ni nada (o casi nada) falta.
Añado mi última colaboración en
El Subjetivo: Teoría del soberano
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19:11
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El café de Ocata
Me llamó hace dos semanas una periodista para concretar una entrevista. Para situarme en el ambiente de su revista me dio los nombres de las personas a las que había entrevistado previamente, dando por supuesto, no sé por qué, que yo estaba en su onda.- Pero yo poco tengo que ver con los nombres que me has citado -le hice observar.- ¿Qué quieres decir?- Pues que comparado con todos ellos yo soy un conservador y casi un carcamal.- ¡Ja, ja, ja!- ¿No te lo crees?- No, porque me han dicho que eres muy majo.- No sé como tomarme eso de majo- ¡Oye, que me estás asustando!- Mira, hacemos una cosa. Te informas mejor sobre mi y me vuelves a llamar... o no.
Me volvió a llamar la semana pasada.- Me he leído algunas cosas tuyas y estoy bastante de acuerdo. Me habías asustado.- ¿Por qué?- Porque creía que lo de conservador iba en serio y me iba a encontrar con alguien de derechas.
Ayer tuvimos la entrevista y hoy nos hemos intercambiado varios mensajes.- Estoy muy contenta, ha quedado muy bien.- Pero estarás conmigo en que poco tiene que ver con tus anteriores entrevistas.- Me has hecho pensar.- Eso siempre está bien.- Pero ya te dije que fui con miedo pensando que podrías ser de derechas.
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23:33
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El café de Ocata
Don Gumersindo de Azcárate, comentando el libro Monarchy and Democracy, del Duque de Somerset (1880), escribe estas inquietantes líneas, que se supone que resumen la opinión del Duque:
"La educación es una carga nacional y un deber del Estado. Tocqueville llamaba la atención sobre este punto importante para apartar los peligros que traería de otro modo el triunfo de la democracia, y bajo el gobierno de Luis Felipe se estableció un sistema de educación nacional de que se prometía Cousin maravillosos resultados (...).
Pero en Francia no se produjeron los beneficiosos efectos anunciados: no sirvió la educación para disipar ilusiones populares, ni para asegurar el orden (...). ¿Es que el sistema de educación es deficiente, o es que hay otras causas que neutralizan sus buenos efectos? Si el pueblo francés ha aprendido moderación, lo debe, no a la enseñanza de la escuela, sino a los desastres de la guerra y a las tristes consecuencias de las derrotas.
¿Ha producido la educación en Alemania la tranquilidad y el contento social? (...) ¿Ha sido una panacea para los males sociales de los Estados Unidos? Según un escritor americano, las nueve décimas partes de los jóvenes encerrados en las penitenciarías han asistido a escuelas: 'nuestros hijos, dice, tienen su pobre cerebro lleno de toda especie de cosas (...), pero no hay sitio en él para las verdades más sencillas del honor, del deber, de la moralidad."
Gumersindo de Azcárate, Resúmenes y juicios críticos, 1883
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11:45
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El café de Ocata
Admiro a don Gumersindo de Azcárate (1840-1917), un intelectual serio y riguroso del que siempre se aprenden cosas, además de un hombre insobornable que estuvo, literalmente, hasta el último minuto de su vida, al servicio de la concordia entre los españoles. Sufrió un ataque cerebral en el transcurso de una reunión del Instituto de Reformas Sociales, que dirigía.
Al ver en Iberlibro que sus
Resúmenes y juicios críticos estaban a la venta por 12,50 euros, no dudé en comprar el libro... sin fijarme en los detalles.
Me llegó ayer y ya lo he devorado. Pero lo curioso es que procedía de Delhi, en la India, donde la editorial Reink Books se dedica a copiar y me imagino que a imprimir según pedido, una gran cantidad de libros. Hace algún tiempo me llegó de la misma manera, aunque de una editorial con otro nombre (Isha Books)
La revolución y los intelectuales, de Maeztu. Si la internacionalización es esto, bienvenida sea.
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23:29
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El café de Ocata
Tras escribir "Querido amigo" me ha parecido que no hacia falta añadir nada más.
Así que no he añadido nada más.
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El café de Ocata
"Un par de años antes de su muerte, Isaiah Berlin imaginaba su funeral como un concierto: Alfred Brendel tocando una sonata de Schubert. Así fue. El 14 de enero de 1998, en la ceremonia a su memoria en la sinagoga de Hampstead, en Londres, Alfred Brendel tocó el andantino de la sonata en La Mayor de Schubert (...). Brendel fue uno de los últimos grandes amigos de Berlin. Los unía, naturalmente, el amor por la música. También un perfecto trío de odios: el ruido, el humo del cigarro y los fanáticos.
"En la misma ceremonia, Bernard Wilson, uno de los hombres más cercanos a Isaiah Berlin, dijo que [lo recordaría] escuchando su música. Concentrado en la melodía, moviéndose ligeramente, perdido en un lugar más allá de las palabras, los argumentos, la historia".
Jesús Silva-Herzog,
La idiotez de lo perfecto.
A las 19:35 recibo un mail de Daniel Capó, que es un sabio y un sabio melómano, que corrige el texto de Silva-Herzog y, por lo tanto, me corrige también a mi. Dice lo siguiente:
"Brendel, en realidad, no interpretó el andantino de la D959 -como se había anunciado previamente- sino el Andante Sostenuto de la última sonata de Schubert, la D960. La gracia se encuentra en la anécdota y en el misterio. Berlin había pedido, en efecto, que en el servicio su amigo Brendel interpretara el andantino de la D959, pero el pianista moravo optó por el Andante Sostenuto. El motivo de ese cambio constituye un secreto que desconozco y, como todos los misterios, prefiero que siga sellado en la intimidad de los dos amigos. Además de Brendel, Isaac Stern interpretó ese día la Sarabande de la Partita número 2, de Bach. Dos mundos muy diferentes, por cierto.Puede leer algo más de la historia de ese día aquí
[notesonnotes.org] Los libros de Brendel, por cierto, son magníficos."
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18:34
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El café de Ocata
Tarde de domingo productiva y feliz. Acabo de enviar un texto de 90.000 caracteres a México y al repasarlo me he sentido cómodo con él y conmigo. A veces cuando escribo algo, noto que me falta un argumento o que me sobra retórica. Lo segundo es fácil de arreglar con las tijeras; lo primero hay que sudarlo, porque cuesta justificar con argumentos que no tienes las convicciones que sí crees que tienes. Pero en este caso todo ha ido bien y la satisfacción sólo se ve empañada por la falta de un buen whisky para celebrarlo. ¿Hay algo más satisfactorio que un trabajo que consideras bien hecho? ¿Hay algo que más te predisponga a la cordialidad contigo mismo que el esfuerzo recompensado por tu propia mirada crítica?
A falta de whisky, me voy a dar un paseo, hoy elegiré de compañero a Benet Casablancas.
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15:51
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El café de Ocata
"Je vis comme un vieux. Je lis un peu des journaux, des morceaux choisis, j'écris quelques notes, je me chauffe et, souvent, je sommeille".
- Jules Renard, Journal, 2 de marzo de 1905
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El café de Ocata
Daniel Innerarity, ayer en
El País, en un artículo titulado "Contra el antipopulismo", sostiene una tesis que dejará satisfechos, estoy seguro de ello, a buena parte de nuestros demócratas modernos, pero que a mi me produce una cierta desazón. Estas son sus palabras:
"La sociedad democrática es un espacio abierto en el que se plantean muchos desafíos (...) que pretenden al menos revisar si el modo como se ha institucionalizado la política sigue teniendo sentido o ha generado algún tipo de desventaja injustificable. Los que velan celosamente por el orden establecido aprovechan este momento para argumentar que cualquier modificación debe llevarse a cabo a través de los cauces legales establecidos, pero no nos dan ninguna respuesta a la pregunta acerca de qué hacer cuando ese marco predetermina el resultado (y no estoy hablando, necesariamente, de Cataluña). La legalidad es un valor político cuando incluye procedimientos de reforma de resultado abierto; si no, apelar a ella es puro ventajismo".- La sociedad democrática no es nunca un espacio completamente abierto. Por ejemplo, hace muy bien en ser reticente frente a los que niegan el pluralismo o el derecho de las mujeres al voto.
- En todo grupo humano suficientemente amplio, sea del tipo que sea, hay siempre alguien que considera que sufre alguna desventaja. Hay varias razones para ello. Me limitaré a señalar dos. Una es que no sabemos crear instituciones que no prohiban la entrada a los que, por ejemplo, sienten una irrefrenable tendencia a tirar basura al suelo simplemente porque hay un letrero prohibiéndolo. Otra, la más importante, es que hay desigualdades producidas por diferentes aspiraciones a la virtud (incluyendo a la virtud republicana) que tienden a ser vividas por algunos como desventajas.
- Efectivamente, cualquier modificación del orden establecido en una democracia debe llevarse a cabo por los cauces legales establecidos. La alternativa son los cauces ilegales que intentan dar a las situaciones de hecho (de fuerza) carácter constituyente.
- Ningún marco constitucional deja indefinido el resultado de su posible reforma. Y hace muy bien. Una sociedad liberal debe recelar de los que niegan el pluralismo y una sociedad democrática, debería hacer todo lo posible por oponerse a un régimen de castas o estamental.
- Toda sociedad democrática deberá decidir el grado de indefinición que puede aceptar en sus posibles reformas sin ponerse en cuestión a sí misma. Y esta decisión ha de ser fruto de un consenso que difícilmente será unánime.
- Sólo una sociedad que no crea en sí misma estaría dispuesta a cambiar en no importa qué dirección.
- La legalidad es un valor político siempre, porque la necesidad de la ley es mayor que la de su contenido. No quiero decir que estemos dispuestos a aceptar cualquier ley. Sino que estamos necesitados de leyes para constituirnos como ciudadanos. La ausencia de la ley es la ausencia de comunidad.
- ¿Apelar a la ley que no incluye procedimientos indefinidos de reforma es ventajismo? El ventajista es aquel que sin miramientos procura obtener ventaja en las relaciones con los otros. Siempre habrá alguien que se creerá en desventaja ante la ley y, sin duda, más de una vez tendrá argumentos legales para ello. Ahora bien, ¿qué quiere decir exactamente Innerarity? ¿Que si no estamos dispuestos a aceptar como posible cualquier reforma, sea del tipo que sea, estamos actuando sin miramientos? No tengo inconveniente en reconocerle que sí con respecto a algunas conductas que, de hacerse legales supondrían, por ejemplo, o mi cárcel o mi exilio.
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23:37
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El café de Ocata
"... alguien que haría mejor las cosas si sólo supiera cómo hacerlo".
Oakeshott
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8:06
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El café de Ocata
"Comparados con las cuestiones teológicas, metafísicas, morales y aun económicas, sujetas siempre a disputa, los problemas puramente técnicos tienen, sin duda, una objetividad bastante consoladora. Sus soluciones son de una evidencia deslumbradora y fácilmente se comprende que el hombre, después de haber conocido la duda y la incertidumbre en otros dominios, haya buscado asilo en la técnica."
Carl Schmitt, La época de la neutralidad y despolitización
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El café de Ocata
Aseguraba Oskeshott que la manía de leer cada día el periódico pone de manifiesto un cierto desorden mental. Estoy totalmente de acuerdo con él.
La lectura de la prensa informa, pero sobre todo conforma.
No me refiero a que cada diario refleje un sesgo político, pues en la publicidad de ese sesgo consiste, de hecho, la libertad de prensa; tampoco a que no lleve a portada lo noticiable, sino lo que supone que para sus lectores es más noticiable, porque todo lector ganado implica un cierto sometimiento a sus prejuicios para asegurar su fidelidad; ni mucho menos al hecho obvio de que la noticia tiene un valor comercial, pues sirve para congregar a un grupo de lectores en torno a ella y así vendérselos inmediatamente a un anunciante.
A lo que me refiero cuando hablo del poder conformador de la lectura diaria de la prensa es a algo que es inherente al periodismo: Toda novedad es y debe ser efímera, porque los diarios no repiten las noticias, viven de renovarlas, pero esta renovación exige una manipulación de lo real para conseguir dar vida narrativa a lo factual.
Los periodistas viven de someter el presente a un relato (aquí Juliana es el maestro indiscutible) o, lo que es lo mismo, de someter lo que ayer nadie se esperaba, al esquema de causas y efectos que hoy el periodista espabilado asegura que era inevitable. En este sentido la prensa juega un papel al mismo tiempo narcótico y consolador. Narcótico, porque le dice al lector: tranquilo, que de esto que hoy tanto te escandaliza, mañana ya no te acordarás, y consolador, porque le ofrece a ese mismo lector una imagen domesticada de la historia, sometida a la lógica, en la que todo aquello que le vende como novedad, es en realidad un nuevo capítulo del despliegue de razones periodísticas que rigen las cosas humanas. Así le oculta el azar sobre el que nos movemos.
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10:08
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El café de Ocata
CEBOLLA
La cebolla es otra historia.
No tiene entrañas la cebolla.
Es cebolla cebolla de verdad,
hasta el colmo de la cebollosidad.
Por fuera cebolluda,
cebollina hasta la médula,
podría escrutar su interior
la cebolla sin temor.
En nosotros extranjería y salvajismo
apenas cubiertos por la piel,
el infierno de la medicina interna,
anatomía violenta,
y en la cebolla, cebolla
y no sinuosos intestinos.
Reiteradamente desnuda
y hasta el fondo asíporelestilo.
Ser no contradictorio la cebolla,
logrado ente la cebolla.
En una, simplemente otra,
la mayor una menor contiene
y la siguiente a la siguiente,
y así la tercera y la cuarta.
Fuga centrípeta.
Eco concertado en coro.
Lo de la cebolla, eso sí lo entiendo,
el vientre más bello del mundo:
se envuelve a sí mismo en aureolas
para su propia gloria.
En nosotros: grasas, nervios, venas,
secreciones y secretos.
Y se nos ha denegado
la idiotez de lo perfecto.
Tanto es así, que las piezas del rompecabezas que somos nunca encajan
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9:34
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El café de Ocata
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19:45
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El café de Ocata
¿Cómo andan nuestros estudiantes en comprensión lectora?
Pues lo primero que PIRLS nos dice es que le aclaremos qué queremos decir con "nuestros". Si nos referimos a Madrid, Castilla y León o Asturias, van bien (pero cuidado con tirar cohetes, estamos muy lejos de los mejores y no sé por qué demonios no podemos aspirar a que nuestros alumnos lean como los rusos); pero si nos referimos a Andalucía, Cataluña y País Vasco, van mal. En definitiva: PIRLS confirma mi sospecha: no tenemos UN sistema educativo.
- Madrid sigue mejorando, así que algo harán bien y algo debiéramos aprender de los madrileños.
- El País Vasco sigue mal y parece que en caída. Ellos saben por qué.
- Quienes me conocen, conocen también que mi obsesión educativa tiene un nombre: tercero de primaria. En este curso los niños viven una revolución intelectual: han de pasar de aprender a leer, a aprender leyendo. Como para comprender un texto es necesario dominar el 90% de su vocabulario, los que vienen de casa con un mayor vocabulario tienen más posibilidades de progresar que el resto y, de hecho, progresan más rápidamente. En cuarto de primaria las diferencias de vocabulario comienzan a manifestarse en diferentes trayectorias que van progresivamente en aumento. En definitiva, si nos remitimos a los hechos, lo que podemos ver es que la escuela amplifica las diferencias lingüísticas domésticas de los alumnos.
Algunos datos muy curiosos que es probable que no recoja la prensa:
- Los mejores lectores se encuentran en las que PIRLS denomina "Safe Schools", es decir, escuelas sin problemas de disciplina. PIRLS dice literalmente que "those attending schools with a disorderly environment had much lower reading achievement than their counterparts".
- Los mejores lectores, en todos los países, acuden a las que PIRLS denomina "academically oriented schools", que son aquellas en los que los profesores "emphasized academic success."
- Los mejores lectores manifiestan un fuerte sentimiento de pertenencia a sus escuelas y, al mismo tiempo, un alto sentimiento de pertenencia a la escuela correlaciona positivamente con el nivel de lectura.
- La influencia familiar es determinante, insisto.
- Los mejores lectores tienen profesores muy bien formados y con mucha experiencia.
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15:41
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El café de Ocata
A.E. Housman, The Application of Thought to Textual Criticism:
"La mayoría de los hombres son bastante estúpidos, y la mayoría de los que no son estúpidos son, en consecuencia, bastante vanidosos; y apenas es posible apartarse de la búsqueda de la verdad sin caer víctima o de tu estupidez o de tu vanidad. La estupidez te mantendrá sujeto a las opiniones recibidas, y continuarás siendo un zoquete; pero la vanidad te empujará a la caza de la novedad, y acabarás encontrándole tres pies al gato. Además de estas trampas y obstáculos, existen varias formas de partidismo: el sectarismo, que te encadenará a tu propia escuela y a tus maestros, y el patriotismo, que te encadenará a tu propio país. El patriotismo es muy alabado como virtud, y en asuntos cívicos, en la etapa actual de la historia del mundo, es posible que todavía haga más bien que mal; pero en la esfera del intelecto es una molestia absoluta ".
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22:24
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El café de Ocata
Escuché la frase casualmente en el último capítulo de una serie de televisión, Godless, y como eran, exactamente, las palabras que estaba buscando para dar forma a una idea que andaba rondándome difusa, me quedé inmediatamente con ella:
Es terrible amar lo que la muerte ha tocado.
En Godless estas palabras reflejan el dolor de alguien que entierra a un joven amante con el que apenas se ha intercambiado un beso, pero a mi me interesaron porque creo que no se puede amar más que lo que la muerte ha tocado, a seres mortales.
He buscado durante una semana denodadamente al autor de esta frase, sin encontrarlo. Algunos dicen que se trata de un poema del judío tudelano Yehuda Halevi, pero tengo sus poemas y no aparece en ellos, aunque no sé si me edición es completa. Me cuentan que en los funerales judíos en Estados Unidos no es inusual que se recite un poema atribuido a Halevi que comienza diciendo
Es algo terrible amar lo que la muerte ha tocado
Y acaba buscando consuelo en eso mismo que ha tachado de terrible:
Es algo humano, amor, algo santo, amar lo que la muerte ha tocado.
Otros sostienen que se trata de un verso extraído de un poema de Immanuel Romano (Immanuel ben Silomón), cosa que me parece más probable, porque se ajusta bien a su visión de la vida, pero no puedo confirmarlo.
Parece, incluso, que Flannery O'Connor cita el verso en una carta, pero atribuyéndoselo a Eugene O'Neill. He encontrado la referencia en un libro francés:
Pitié pour l'homme qui aime / ce que la mort peut toucher.
Pensaba yo mientras iba dando palos de ciego en busca del autor de este verso que los cristianos estamos tan ligados a lo que la muerte ha tocado que hasta nuestro Dios ha sido tocado por ella, quizás para que lo podamos amar de esa manea inconstante y voluble que es la nuestra... no lo sé.
Si sé que la muerte no puede tocar otra cosa que la vida y que toda vida es vida porque lleva en sí la herida del contacto con la muerte, que es una herida por la que mana el tiempo.
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15:19
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El café de Ocata
Se cuenta que en tiempos de Margaret Thatcher los conservadores quisieron honrar a Oakeshott con el título de caballero. Una semana antes de que se hiciera oficial esa dignidad, se conoció públicamente un hecho que hizo cambiar de opinión a los
tories. El septuagenario profesor había sido sorprendido por un policía teniendo relaciones sexuales con su mujer en la playa"- Jesús Silva-Herzog,
La idiotez de lo perfecto(un libro hermoso e inteligente).
A tener en cuenta que Michael Oakeshott:
1. Siempre anduvo rodeado de bellas mujeres. Una de ellas fue Iris Murdoch, que cuenta que nunca nadie le besó los pies mejor que él. Me atrevería a decir que a todas les fue infiel.
2. Fue un conservador sui generis, que es como creo yo que han de ser los conservadores. Desconfiaba del liberalismo de Hayek porque le parecía demasiado dogmático (o, quizás, porque lo entendía como un intento de construir un sistema) y del liberalismo de Thatcher. porque veía en él un exceso de fe política.
3. Un asistente a su funeral declaró que a Oakeshott le hubiera gustado la ceremonia, "porque no ha tenido nada de extraordinario".
4. Lo que más me gusta de este hombre es la tesis de que allí donde veamos a unos políticos muy serios, si escarbamos un poco, descubriremos un juego; pero un juego vivido con tal intensidad que los jugadores ignoran que es un juego.
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El café de Ocata
Según Aldous Huxley, un intelectual es una persona que ha descubierto algo más interesante que el sexo.
Por ejemplo:
AQUÍ
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El café de Ocata
Hace treinta años Allan Bloom se dirigió a un grupo de estudiantes y profesores de la Universidad de Harvard con estas palabras: "Fellow elitists..". Por supuesto, lo decía en serio. Hoy si tratas a alguien de elitista, se enfada, y, sin embargo, todos -creo- queremos ser gobernados por los mejores, llevar el coche al mejor mecánico, tomar un café en la mejor cafetería, comer los mejores callos acompañados con el mejor vino que podamos permitirnos o no desperdiciar un beso besando de cualquier manera.
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8:40
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El café de Ocata
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20:11
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El café de Ocata
Me acaban de pedir con la mayor urgencia un prólogo para un libro sobre la espera. He dicho que sí, así que tendré que escribir rápido y sin demora. Lo que me ha animado a aceptarlo ha sido, por supuesto, el tema, que me parece apasionante -yo hace tiempo que me veo a mí mismo acometiendo el deber moral de entretener la espera- y la editorial, pero el empujón definitivo me lo ha dado Mark Lilla, que es el autor de la edición inglesa del libro.
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11:56
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El café de Ocata
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El café de Ocata
Viniendo de Madrid, leo en Rémi Brague (
El reino del hombre): "Nuestro cuerpo, que es sin embargo 'nuestro', escapa ampliamente a nuestro control. San Agustín atribuye esta insubordinación a las consecuencias del pecado por el que Adán desobedeció a Dios. Sólo algunos individuos excepcionales tienen un perfecto dominio de su cuerpo. Agustín los cita, y no deja de ser sorprendente encontrar entre esta élite a un antepasado de Joseph Pujol, quien dio algo que hablar, hacia 1900, en la escena de los music-halls."
La cita de Agustín se encuentra en la
Ciudad de Dios XIV, 24, que dice: "Otros, sin fetidez alguna, emiten por la parte inferior sonidos tan acompasados que dan la impresión de cantar por esa parte."
Respecto a Joseph Pujol, se trata de un catalán universal que por alguna oscura razón no conoce en la Cataluña actual el renombre a que sus sonadas hazañas lo hacen merecedor. Bien es cierto que él, en el Moulin Rouge, donde actuaba, se hacía pasar por marsellés, pero todo parece indicar que era de Reus. Su nombre artístico era "
Le Pétomane" y su hijo dijo de él que "a lo largo de su vida nos dio lo mejor de sí mismo". Sólo añadiré, para evitar caer en la escatología, que Freud lo visitaba con frecuencia por considerarlo un caso evidente de estancamiento psicológico en la fase anal de la libido.
¡Y después dicen que la filosofía no sirve para nada! A la próxima persona que vea proclamando que su cuerpo es suyo, pienso rogarle que no me lo demuestre.
Por cierto, amigos de Ediciones Encuentro, nada que objetar a que Brague hable de Jérôme Cardan, pero si traducimos el libro, mejor darle a Gerolamo Cardano lo que es suyo, su nombre propio.
Sobre Cardano en El Café de Ocata:
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Cardano se enamora-
Cardano y los intelectuales-
Cardano y Sócrates
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El café de Ocata
Había en mi pueblo un orate pacífico y estrambótico. Un día salió a la calle con un ojo cerrado y le explicaba a quienquiera que le preguntase por los motivos de su conducta, que obraba así porque era inteligente. Tras observar meticulosamente el proceso de envejecimiento de los humanos, había descubierto que todo en el cuerpo se desgasta con el uso. Por lo tanto si algo dejaba de usarse, se mantendría en buen estado. Por eso había decidido no desgastar un ojo llevándolo cerrado y así ahorrar vista para la vejez.
Yo lo recuerdo bien porque a mi, que era un niño que acababa de hacer la primera comunión, a escondidas de hablaba, con aire confabulador, de la mandrágora. Yo no sabía nada de esta planta mitológica y él me iba informando de sus propiedades poco y a media voz, dándome a entender que sus poderes eran enormes pues sus raíces no eran vegetales sino medio humanas: tenían forma de un hombrecillo capaz de hablar y revelar misterios. Podía, por ejemplo, adivinar dónde había enterrado un tesoro del tiempo de los moros. A mí todo esto me provocaba una inquietud extraña. Por una parte sentía la emoción de saber que estábamos tratando de cosas que los demás ignoraban y que debían ser tratadas con sigilo y discreción. Esto me hacía sentirme muy importante, como si caminara bastante por delante de los demás. Pero había algo que me inquietaba y que el orate -no diré su nombre- se negaba a aclararme. Para arrancar la mandrágora era imprescindible contar con mi perro. Pero, ¿por qué? ¿por qué había algo que sólo mi perro podía hacer? Como no me lo aclaró, no se le cedí y ahí se acabó nuestra intromisión en el mundo de lo misterioso.
Mucho más tarde descubrí que la mandrágora, al sentirse arrancada del suelo da tales gritos que vuelve loco a todo el que está cerca de ella. Por eso el orate necesitaba un perro. Este descubrimiento me dejó confuso y vagamente culpable, porque aquel perro mío de repente perdió el juicio. Cazaba gallinas de los corrales como si fuer aun zorro y se las iba a comer a la iglesia, a los pies del altar de San Antón. Por eso acabó siendo sacrificado.
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23:19
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El café de Ocata
Entre montes, por áspero camino,
tropezando con una y otra peña,
iba un viejo cargado con su leña,
maldiciendo su mísero destino.
Al fin cayó, y viéndose de suerte
que apenas levantarse ya podía,
llamaba con colérica porfía
una, dos y tres veces a la muerte.
Armada de guadaña, en esqueleto
la Parca se le ofrece en aquel punto;
pero el viejo, temiendo ser difunto,
lleno más de temor que de respeto,
trémulo la decía. y balbuciente:
"¡Yo..., señora.., os llamé desesperado;
pero..." "Acaba; ¿qué quieres, desdichado?"
"Que me carguéis la leña solamente."
Félix María de Samaniego
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23:48
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El café de Ocata
Me ha dolido escucharle a una persona que va en los primeros puestos de la lista electoral de Puigdemont, que "España ha hecho un genocidio en Cataluña". Quizás para justificarse un poco ha añadido que "eso ya se ha dicho antes y no lo he dicho yo, si leemos un poco veremos que Rovira i Virgili ya lo decía".
Me ha dolido especialmente porque me temo que estas palabras muestran un peldaño más de una escalada que no sé a dónde nos conduce, pero no desde luego a la bienllevanza.
No recuerdo haber leído nada en Rovira i Virgili que confirme las palabras de esta persona (pero ni he leído todo de Rovira i Virgili ni mi memoria es indeleble). Recuerdo, eso sí, que Josep Benet tituló uno de sus libros El intento franquista de genocidio cultural contra Cataluña (1995), refiriéndose a los primeros años del régimen franquista. Sé que en el exilio hubo voces catalanistas que solicitaron a la ONU que juzgara a Franco por genocidio (conclusiones del LLibre Blanc de Catalunya, Buenos Aires, 1956) y que Josep Maria Solé i Sabaté, siguiendo a Benet, habla también por algún lugar de "genocidio cultural" y seguro que no ha sido el único en seguirlo en esta dirección.
Aun siendo indudable la represión contra la cultura catalana, la expresión "genocidio cultural" me parece excesiva. Ningún genocida hubiera permitido, por ejemplo, experiencias como la de la escuela Isabel de Villena, abierta en 1939, o la edición de Verdaguer en 1943, o que un falangista como Giménez Caballero incluyera en su manual de bachillerato de literatura de España (1946) algunos versos de la Oda a la Pàtria de Aribau. ¿Hubo "intento", como dice Benet? Por parte de algunos, probablemente sí.
Que esta persona de cuyo nombre no quiero acordarme y que muy probablemente ocupará un escaño en el parlamento de Cataluña considere que España -no este o aquel político, sino España- ha cometido un genocidio en Cataluña y que lo equipare, como lo ha hecho, al que padecieron los armenios, me ha dolido, pero sobre todo me deja anonadado.
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21:35
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El café de Ocata
Hubo un tiempo en que me pasaba horas analizando los detalles de cada informe PISA. Ya no. Cada vez soy más escéptico sobre las posibilidades de PISA para informar correctamente de lo que pasa en España. Más aún, sospecho que la enorme cantidad de datos disponibles comienza a ocultarnos la realidad. Así que esta vez he echado una mirada rápida al último informe. Lo que me ha llamado la atención ha sido lo siguiente:
- Los países cuyos alumnos rinden bien individualmente son los mismos cuyos alumnos rinden bien en grupo.
- Las chicas, que tienen menos capacidad para resolver problemas en ciencias y en matemáticas, son las más predispuestas a trabajo en grupo en todos los países.
- Sigo sin ver una relación directa entre gasto escolar por alumno y resultados. Los que más gastan no son los que mejores resultados tienen.
- Como siempre, los mejores son los que más porcentaje tienen de alumnos excelentes. Cuanta más excelencia, menos deficiencia. Y cuanta más deficiencia, menos excelencia.
- España no está mal. Lo que está muy mal son las diferencias en el interior de España. Sigo pensando que no tenemos UN sistema educativo. Entre Madrid y Extremadura hay 45 puntos de diferencia.
- Se confirma la mejora de Madrid y el empeoramiento del País Vasco.
- Es España las diferencias dentro de los centros son mucho mayores que las que existen entre los centros.
- Las percepciones de los alumnos españoles sobre sus capacidades están por encima de sus resultados. Su nivel de satisfacción con el centro es muy alto. Se encuentran entre los alumnos con más confianza en sí mismos y más satisfechos del clima del centro.
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17:18
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El café de Ocata
Pensando en México
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3:50
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El café de Ocata
Viajar a Jaén es viajar a otro mundo. Porque hay otros mundos y algunos son más, mucho más cordiales, aunque estén a trasmano. Jaén, por ejemplo.
Jaén es para mí el lugar en el que el taxista que te recoge a las 8 de la mañana para llevarte a Córdoba se acuerda de que hace dos años te recogió a las siete de la mañana para llevarte a Granada y en la hora que pasamos juntos por el camino te da una lección de lo que es amar la propia tierra con honestidad, es decir, con sinceridad y sin aspavientos.
Jaén es el lugar donde los iberos decidieron festejar su propia existencia con la verdad de un gran arte. En el Museo de Jaén se encuentran algunas de las obras de arte más íntimamente sobrecogedoras que yo he visto nunca.
Jaén es el lugar donde la amistad y esa cosa inefable que es ser buena gente no caducan nunca. Más aún: creo que los que nos encontramos de paso en Jaén hacemos de nuestro tránsito común por esta ciudad andaluza una excusa para la añoranza de futuros encuentros.
Jaén es un lugar en el que se come lo estrictamente delicioso sin abalorios ni rechiflas: el aceite, claro, pero también las espinacas o los huevos rotos o el jamón, o las migas de pan torcido con torreznos, o las gachas con matalahúva, las croquetas, los griñones o el tocinillo de cielo con higos de Jimena...
Jaén es un lugar donde se bebe mucho (esos vinos de la Sierra Sur, eclipsados por la fama del olivo) y se duerme poco... pero después de haber trabajado en serio.
Jaén es el lugar que ha convertido el tranvía en una performance artística permanente.
Jaén es el lugar en el que al enterarse un taxista que vienes de Barcelona te puede explicar de manera prolija que la culpa de "lo de Cataluña" la tiene Rockefeller.
Jaén es el lugar del que vuelves decidido a que, la próxima vez, te quedarás más tiempo, porque el reclamo de Baeza y Úbeda no admite más dilaciones.
Jaén es el lugar en el que no hay turistas, todo es oxígeno y grandes espacios -la espaciosa y verde España- cubiertos de olivos sobre los que amanece lentamente un cielo siempre acogedor.
Jaén es el lugar.
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9:22
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El café de Ocata
Leo en el prefacio del
Narciso de Rousseau: "Dans un Etat bien constitué, tous les citoyens sont si bien égaux, que nul ne peut être préféré aux autres comme le plus savant ni même comme le plus habile, mais tout au plus comme le meilleur: encore cette dernière distinction est-elle souvent dangereuse, car elle fait de fourbes et des hypocrites".
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23:15
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El café de Ocata
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17:27
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El café de Ocata
"Es casi imposible haber pasado por las Brigadas Internacionales de España, que eran una pérfida maquinaria totalitaria, y salir libre, a menos de realizar una ruptura definitiva con esta maquinaria."
- Victor Serge, carta a Vanni B. Montana, 20 de mayo de 1945.
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9:14
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El café de Ocata
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19:43
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El café de Ocata
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15:11
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El café de Ocata
"Y veo también, al otro lado del anchuroso valle Amblés, el castillo de Más que os pese. Se alza sobre un altivo cerro que señorea las tierras del pueblo de Sotalbo. Poéticos nombres los de muchos lugares de mi tierra: Madrigal, Hoyo-casero, Soto-albo, Solo-Sancho, Son-soles, Ama-vida, Ojos-albos, Tornadizos, Vico-lozano, Salva-Dios y la Hija de Dios; estos dos incluso comparables al más extraño de los nombres geográficos que me son conocidos: al de una altura de las cercanías de Belchite, llamada La novia del viento."
- Claudio Sánchez Albornoz, Frente al mañana.
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18:27
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El café de Ocata
"La Arquitectura ama el adorno. Pero esta pasión suele ser tan arriesgada en ella como la que tienen las hijas de familia a adornarse con modas. Si a una joven se les deja correr a capricho, irá tan lejos que llegará a tocar en la majeza, que es la baja elegancia de los trajes. En esta misma baja elegancia puede venir a dar la Arquitectura con sus adornos."
- Isidoro BOSARTE. Observaciones sobre las Bellas Artes entre los antiguos, 1791.
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10:57
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El café de Ocata
Con diferentes bestias hizo noche
En una venta un burro de un librero,
Que una carga de libros conducía,
No me acuerdo a qué feria de este reino.
Después que buenamente despacharon,
Los animales el sabroso pienso,
En su idioma bestial se entretenían
Sobre varias materias discurriendo.
Cada bestia decía su dictamen
Según su inteligencia y su talento,
Conformándose todos fácilmente,
Sin réplicas, sin contras ni argumentos.
Solo entre todos nuestro lindo burro
Con orgullo insufrible, e inmodesto
Se burlaba de todos bravamente
Su ignorancia bestial escarneciendo.
Por último cansado ya de oírlos,
Con suma gravedad y magisterio
Lanzó un rebuzno fuerte y sostenido,
Medio oportuno de intimar silencio.
“Ignorantes, les dijo, ¿por qué causa
Osáis hablar a donde yo me encuentro?
¿No teméis mi censura formidable?
¿Ignoráis de mi estudio los progresos?
Los dientes me han nacido entre los libros,
Cuanto se ha escrito trastornado tengo,
Y tan fácil entiendo a los latinos,
Como a griegos, egipcios y caldeos”.
“Según eso, replican, ¿tú has leído
Todos esos autores?” “Ni por pienso,
Pero su ciencia a modo de contagio
Desde los lomos me pasó al celebro”.
Esta satisfacción desatinada
Fue muy cumplida para aquel congreso,
Y en honor de su autor hicieron todos
Salva burral de zumbas y cencerros.
Muchos zoquetes, revolviendo libros,
Que nunca entienden, celebrados veo,
Mas ¿por quién? Por parientes de los otros
Que hicieron salva al burro del librero.
Correo Literario de Murcia, número 13. 13 de octubre de 1792.
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23:31
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El café de Ocata
Madrid debe su origen a un emir, gran amador de mujeres, y tan dominado por su pasión por ellas, que no podía separarse de su harén. Se decidió una vez a emprender una campaña contra los politeístas -así llamaban los musulmanes a los cristianos trinitarios- y llegó con su ejército hasta Guadalajara. Pero no pudo proseguir la expedición. Los cronistas arábigos, demasiado indiscretos, nos cuentan que desde su salida de la ciudad de Córdoba le asaltaban sueños lúbricos, y que al llegar a la población que en lengua vasco-ibera se llamaba Arriaca (...), Abderrahman II padeció o gozó de una nocturna polución. El emir poeta y sensual abandonó entonces a sus tropas, corrió cerca de Tarub, su favorita, y amó con tanto brío a sus mujeres que engendró en ellas ochenta y siete hijos.
En esta frustrada heroica empresa, Abderrahmán, al caminar de Toledo hasta Guadalajara, pasó no lejos de Madrid y allí mandó alzar una ciudad murada.
- Claudio Sánchez Albornoz, Frente al mañana.
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10:15
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El café de Ocata
David Huerta, Las palabras de Konstantinov
Efectivamente, a veces las causas nos imponen, para seguirlas, lógicas muy extrañas
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8:56
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El café de Ocata
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El café de Ocata
Como era de esperar, se está publicando una avalancha estudios eruditos sobre la revolución rusa que intentan explicarnos con la mayor claridad posible las causas y consecuencias de ese evento histórico. Muchos de los libros publicados me parecen de interés (me parecen porque lo presumo, ya que no he leído todos, ni mucho menos), pero hasta los más interesantes, cuando explican las causas de la revolución de octubre, suelen pasar por alto un acontecimiento que es algo más que un pequeño detalle: Sin Lenin, no hubiera habido revolución, pero si Lenin pudo estar en Rusia dirigiendo la revolución fue porque la Alemania imperial y militarista del Kaiser lo metió de contrabando en el país con la intención de desestabilizar el poder del zar desde adentro. Claro que si esta causa es importante, entonces sabemos poco de las causas de los acontecimientos históricos, porque nunca podemos garantizar que nuestras buenas intenciones se corresponderán con buenos resultados. De hecho, estamos muy lejos de conocer a priori las consecuencias de lo que ponemos en marcha políticamente.
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10:35
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El café de Ocata
Ustedes conocen mi admiración por el filósofo Jaime Balmes y, sobre todo, por el periodista Jaime Balmes. Ayer cayó en mis manos este librito que se presenta como "la perla que le faltaba a la diadema con que aparece coronada en el mundo literario la figura del Dr. D. Jaime Balmes". Lo menos que puede decirse es que como perla deja bastante que desear. Tanto es así -y este me parece un argumento definitivo- que utiliza varias veces la palabra "rosicler". El Balmes poeta es un romántico de rima facilona que amplifica todos los vicios del romanticismo sin que parezca sensible a ninguna de sus virtudes. Que conste que este naufragio de la música lírica balmesiana no disminuye m admiración hacia él. Más bien contribuye a reforzar mi imagen de la vida humana como un frente de batalla muy amplio en el que el ejército, lejos de avanzar a la par, avanza como una línea quebrada, con cimas de vanguardia que se adentran con coraje en territorio desconocido y valles de retaguardia que andan remoloneando en la trivialidad.
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12:59
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El café de Ocata
Dicen que quien tiene un amigo, tiene un tesoro. Y así es. Pero si ese amigo -amiga, en este caso- es B. M., entonces uno tiene un finísimo crítico literario en París.
Gracias a B. leí
La fin de l'homme rouge cuando aquí nadie tenía ni idea de quién era Svetlana Alexievich, o
Le météorologue, de Olivier Rolin, antes de que ninguna editorial española pensara en traducirlo, o
Révoltée, de Evguénia Iaroslavskaia-Markon, que entre nosotros ha pasado incomprensiblemente desapercibido. Así que cuando me avisó de que me enviaba
L'ordre du jour, de Éric Vuillard, ya sabía que recibiría una joya. Tanto es así que mientras el libro estaba en tránsito de París a Ocata, al autor le han dado el Premio Goncourt. Me ha llegado esta mañana y ya lo he devorado. ¡Qué libro! ¿De qué va? Pues de gran literatura. Creo que no sería capaz de definir qué es la gran literatura, pero sé muy bien reconocerla cuando me la encuentro entre las manos. El ritmo narrativo, la precisión descriptiva, la atmósfera envolvente, ese retrogusto que se te queda ahí, en el paladar, como de un buen vino. Esa necesidad de detenerte a repetir la lectura de una frase para volverla a paladear. Esa esperanza de que el libro no se acabe. Incluso ese deseo de venir aquí a contarlo.
Gracias, B.